La sub-21 desata pasiones en Pasarón

carmen garcía de burgos PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

La selección española entrenó a puerta abierta, pero la de Estonia finalmente no quiso

10 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

«¡Denis, Denis!». Los niños se pegaban a las vallas publicitarias y estiraban los brazos hacia el centro del campo. Allí, a varias decenas de metros, el joven gallego lanzaba a puerta. «¿Sabéis que no os escucha, verdad?», les recordaba otro pequeño tras la primera fila. «Sí, pero...», comenzó uno de ellos la frase, «...por intentarlo que no quede», terminó su compañero. Los gritos se escucharon desde el otro lado del estadio municipal de Pasarón, en la zona de vestuarios, cuando varios de los jugadores de la Selección Española sub-21 se acercaron a saludar, firmar autógrafos y posar con ellos tras el entrenamiento a puerta cerrada que sirvió de ensayo general para el partido que esta tarde, a partir de las 18.45 horas, les enfrentará a Estonia y en el que se juegan la clasificación para la Eurocopa 2017. El equipo visitante entró mal a la afición pontevedresa, anulando en el último momento la convocatoria pública para poder concentrarse a puerta cerrada por ser la única sesión que iban a tener antes del encuentro.

Ni siquiera los propios futbolistas lo sabían, pero estaban pisando un césped que hace exactamente cincuenta años había sido testigo de una victoria histórica: la que el Pontevedra sellaba en casa -no en el mismo campo físico, pero sí en el mismo hogar- ante el Barcelona por un gol a cero. Medio siglo después era aclamado en Pasarón un joven que cambiaba la camiseta azulgrana por la roja, y que hace años hizo lo propio con la del Celta, en cuyas filas se formó. Junto a Denis Suárez, otros dos gallegos asumirán la responsabilidad de llevar al triunfo a la Selección Española sub-21. Finalmente Santi Mina no estará entre ellos, «no caben todos», justificó el seleccionador, Albert Celades. También tuvo palabras para los otros tres: «Jonny está muy asentado en el equipo ya desde el año pasado. Rubén cuenta con mucho infortunio, porque un portero es raro que se lesione tantas veces como él la temporada pasada y esta, pero un chico del que sabemos sus cualidades y sus condiciones, y siempre es una opción para nosotros».

Denis, la estrella

«Y Denis, después de jugar en varios equipos y dar vueltas por varios equipos, ha alcanzado un punto de madurez importante, está en un rendimiento bueno en un sitio muy difícil y muy exigente como es el Barça, y todo eso lo que hace es ayudarnos para competir mejor».

A la Selección no le vale otro resultado que no sea una victoria si quiere estar en Polonia. Y, de paso, volverá a escribir un nuevo capítulo de la historia futbolística del país y de Pasarón. El de hoy será el primer encuentro internacional de competición pura que se disputa en el estadio pontevedrés. La sub-21 no puede permitirse ningún error: ni un empate ni una derrota serían suficientes para evitar su eliminación directa de las quinielas.

Los errores que cometió ante Suecia y Croacia le pasaron factura, y tuvo que emplearse a fondo y dar lo mejor de sí el pasado miércoles en San Marino para poder mantener sus opciones en la clasificación. Lo logró, de hecho, gracias a los goles de Denia Suárez, Munir El Haddadi y Jorge Meré. Ahora tiene que intentar repetir resultado, o al menos aproximarse a él, y esperar. Ya no está solo en su mano el pase a Polonia. El empate ante los nórdicos (1-1), y la derrota ante los balcánicos (0-3) le arrebataron la posibilidad de decidir por sí misma qué papel quiere jugar en Europa. Lanzará un voto crucial esta tarde en casa ante Estonia, pero tendrá que permanecer atenta a lo que Suecia y Croacia hagan en su enfrentamiento directo.

En la Selección todos son conscientes: «Sabemos de la importancia del partido, sabemos lo que nos jugamos, y estamos mentalizados para afrontarlo de la mejor manera». Albert Celades comparecía ante los medios de comunicación nada más terminar el entrenamiento. Había pedido que fuera breve: todos querían ver a la hermana mayor, la Roja, en su partido en Albania.

Todos al campo

Y, mientras aquella tuvo que conformarse con los poquísimos españoles que pudieron desplazarse hasta el campo para animarlos, la sub-21 no quiere hacerlo sin los pontevedreses: «Para nosotros es muy importante el apoyo de la gente. Vigo y A Coruña tienen fútbol profesional, de Primera División, pero el hecho de poder jugar aquí con jugadores como los de esta convocatoria, que pertenecen a los mejores equipos y juegan en las mejores ligas, siempre es un aliciente más. Y especialmente con todo lo que conlleva el partido de mañana (por hoy), que puede valer una clasificación. Queremos animar a la gente a que venga con actos como entrenar a puerta abierta, para que la gente sienta que pueden estar cerca de estos jugadores y, al mismo tiempo, que nosotros sintamos esa cercanía, ese calor». El catalán agradeció los esfuerzos de la Federación Galega de Fútbol para lograr que el césped estuviera en buen estado en apenas unas semanas.