Los butroneros, libres con cargos

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

En el seno de la policía se teme que, al ser extranjeros, puedan intentar abandonar el territorio nacional sustrayéndose a la acción de la Justicia

21 feb 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Tras su paso por el juzgado, los cinco detenidos en los últimos días en relación con una serie de robos con butrón en Pontevedra, Vigo y Verín quedaron en libertad con cargos. Se les imputarían delitos contra el patrimonio, si bien prosiguen las pesquisas por si fuera posible vincularles con otros hechos delictivos de similares características ocurridos en las Rías Baixas.

La decisión judicial, no obstante, causó ciertos recelos en el seno de la Policía Nacional. Temen que los sospechosos, de nacionalidad rumana, puedan intentar regresar a su país de origen y, de este modo, sustraerse de la acción de la Justicia española. Las fuentes consultadas precisaron que no es la primera vez que se produce este tipo de circunstancias y pusieron como ejemplo un juicio que se está celebrando en Santiago por robos de coches de alta gama, entre ellos el de David Beckham, en el que varios de los imputados están en paradero desconocido.

Estos cinco últimos arrestos son consecuencia de una investigación que se inició el pasado mes de septiembre en Pontevedra. Merced a la colaboración de un vecino, agentes de la Comisaría Provincial pudieron frustrar un asalto a un estanco de la calle Fernando Olmedo. Fueron detenidas dos personas con pasaporte de Rumanía.

Según confirmaron este miércoles desde la Policía Nacional, «las primeras pesquisas apuntaban a que los dos arrestados podrían pertenecer a un grupo criminal más amplio, asentado en Madrid y dedicado a los robos con fuerza en establecimientos comerciales mediante un modus operandi muy concreto». Al parecer, este grupo, tras un detenido estudio de sus objetivos, se desplazaban el mismo día del robo desde la capital de España hasta Galicia en furgonetas alquiladas. Una vez consumado el butrón, regresaban a Madrid y se deshacían del botín. Además, tomaban medidas de precaución para intentar esquivar posibles seguimientos policiales. Así, por delante del furgón, se situaba otro vehículo que realizaban las veces de lanzadera.