El taller de reciclaje de bicis goza del respaldo de los ciudadanos
19 dic 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Las Abelux que hizo famosas Verano Azul y que cuando terminó esta serie dejaron de fabricarse, las cotizadas BH California o las Injusa, algo más modestas, son algunas de las joyas que permanecían guardas en los trasteros y han recobrado vida para ser reutilizadas. El obradoiro de recuperación de bicicletas infantiles instalado en Monte Porreiro desborda. La iniciativa Recicletas de Nadal, que puso en marcha la Concellería de Benestar Social, tuvo una enorme respuesta ciudadana y las donaciones de bicis pequeñas para reparar rondaron las doscientas. Muchas de ellas llegaron oxidadas, con las ruedas reventadas y, tras un minucioso trabajo mecánico, artesanal y de diseño, las cincuenta que ya han sido recicladas quedaron como nuevas, para que estas Navidades los niños de familias sin recursos, usuarias de los Servizos Sociais del Concello, puedan disfrutarlas.
«A modiño»
Eusebio Riveiro e Ismael Rodríguez son los coordinadores y monitores de este taller de reciclaje, que tiene una doble finalidad social, ya que en él trabajan también usuarios de Servizos Sociais que además de recibir nociones sobre la recuperación de bicicletas, también perciben una remuneración económica compatible con la prestación social del Risga. Cada máquina pasa por un exhaustivo proceso de limpieza, desmontaje, pintado y rediseño hasta conseguir un aspecto novedoso y totalmente personalizado. Se le retiran los nombres de las marcas, se le tatúan frases como A modiño, Vas caer o Sen dentes y otras pegatinas, se abrillantan los cromados y el resultado final es sorprendente. Las bicis más antiguas donadas a este taller son de los años ochenta y no todas compensa recuperarlas, pero se hace lo posible. Riveiro explicó que todas tienen su valor y, aunque no hay piezas de museo, sí que hay algunas muy cotizadas por coleccionistas en el mercado de segunda mano, como la BH California. Las más nuevas son máquinas en buen estado que se le han quedado pequeñas a sus propietarios originales «porque los niños crecen y las bicis no».
Pionero
El Concello de Pontevedra ha sido pionero en esta iniciativa a nivel nacional y europeo, según Eusebio Riveiro, que está muy al tanto de todo lo que se mueve en el mundillo de las bicicletas. Al menos, no se conoce ninguna actividad tan completa, desde el punto de vista de la solidaridad, la integración social y la mejora ambiental que supone el reciclaje de estas máquinas perfectamente útiles y que de otra forma acabarían en un basurero o en la chatarra. Las bicis ya recuperadas serán entregadas la próxima semana a los pajes de Los Reyes Magos, que luego las dejarán en los hogares de los nuevos destinatarios. Digan lo que digan, Riveiro es de los que piensan que «donde esté una bicicleta, un balón o una muñeca, que se quiten los Ipad y las Play Station».