Clesa afronta la semana decisiva para que Acolact cierre la compra

pontevedra / la voz

PONTEVEDRA

La sociedad lleva desde finales del año pasado intentando cerrar la operación

16 jul 2012 . Actualizado a las 06:55 h.

El margen se acaba. Si no hay nuevas prórrogas, este miércoles, 18 de julio, concluye el plazo dado por el juez del Mercantil número 6 de Madrid para que la sociedad Agrupación Cooperativa Láctea SL (Acolact) firme la escritura de compraventa de la planta de Clesa en Caldas.

Es, sin duda, la noticia que trabajadores y exempleados, sindicatos agrarios, Concello y Xunta vienen esperando desde que hace un año y medio estalló la crisis en la empresa del grupo Nueva Rumasa. En la actualidad, la factoría ubicada en Saiar mantiene una mínima producción de yogures y algo de mantequilla con una plantilla de treinta trabajadores, cuando llegó a superar los 150. Es el mínimo plantel con el que el nuevo inversor pretende arrancar la fabricación.

Acolact, la sociedad que forman Feiraco y otras nueve cooperativas gallegas, lleva desde finales del 2011 intentando cerrar la operación. Por el camino no han sido pocos los obstáculos que ha tenido que superar para poder reunir la financiación para hacerse con la planta de Clesa -la única que queda en Galicia-, contando con el apoyo de XesGalicia y el Igape. El coste global de la operación asciende a 10,2 millones de euros, de los que 2,45 corresponden a la unidad productiva (terrenos, planta, naves, instalaciones, maquinaria y la marca Clesa).