Alberto Barreiro dirige el diseño digital de la cadena televisiva ITV
04 feb 2012 . Actualizado a las 07:00 h.«Una temporada en Londres y acabas por mirar el resto del mundo con un toque de condescendencia; desde aquí, cualquier otro sitio parece exótico y pintoresco», dice Alberto Barreiro González. Para este pontevedrés, esa temporada se alarga desde hace catorce años, desde que como refiere, en el 98 vino «a echar un vistazo» y allí sigue, «atrapado por la velocidad en la que la ciudad circula y de la cual es imposible bajar sin romperse la crisma».
Él afirma que hay casi un Londres por habitante: «Más que una ciudad, es el tablero de un juego de rol, en el que la ciudad va apareciendo según nosotros los narradores vamos contando nuestra propia historia. Eso explica por qué jamás he visto la famosa niebla ni la gente que toma el té a las cinco».
En su caso, es el Londres que vive un artista de la ciudad del Lérez, que desde hace un año dirige el diseño de la sección digital de la prestigiosa cadena ITV, la televisión comercial más importante de Inglaterra y segunda después de la pública BBC -«vive de los anunciantes y de producir y comercializar programas como Downton Abbey o Factor X»-. Tiene a su cargo a un equipo de diez personas. «Tenemos algunas de las webs más visitadas del Reino Unido -indica-. Por ejemplo la de Factor X, un programa de talentos del que salió Leona Lewis, o Britain got talent, de donde surgió Susan Boyle. Hay un tráfico de millones de personas a la web para comentar esos momentos. Nuestra misión es trasladar la experiencia de la televisión al mundo digital. Se trata de uno de los campos más interesantes del diseño en este momento. La forma en la que la gente consume contenido televisivo está cambiando, impulsado por nuevas tecnologías, nuevos formatos y la influencia de las redes sociales. Nuestro trabajo consiste en dirigir esta convergencia, de modo que tenga sentido para nuestra audiencia».
El mundo digital ha estado presente en toda su trayectoria, desde que terminó Bellas Artes -fue de la primera promoción de la facultad pontevedresa-. «Estaba empeñado en crearme una carrera como artista, explorando los medios digitales y las temáticas que surgían de ellos», recuerda. Tras los cursos de doctorado, llegó a Londres para trabajar en la tesis sobre Arte y Tecnología, con un profesor alemán que daba clases en la Universidad de Winchester, cerca de la capital británica. «Hice buenos amigos y decidí quedarme».
Comenzó como freelance, lo que le daba flexibilidad para dedicar tiempo al arte, mientras vivía en Hackney, al este, «donde se decía que era el lugar del mundo con más artistas por metro cuadrado». Pero pronto empezó a trabajar en Yahoo. Allí también fue director de arte y desarrolló su perfil como creador de productos. «A pesar de seguir considerándome un artista que cayó en el diseño por accidente, hice buena carrera en la empresa y fui responsable del diseño de productos de un perfil muy alto».
En Yahoo
Entre ellos figuró Yahoo Finance para Europa, el portal financiero más destacado en aquel momento. Y también fue el responsable de la página principal de Yahoo a nivel global en el 2005, «la más vista del mundo entonces». Estuvo seis años y después de empaparse de ideas y conocer el mundo de Silicon Valley, montó su propia empresa, Webjam, junto a dos socios. «Era un producto que bebía de las tendencias de la web 2.0 y que permitía a los usuarios crear sus propias comunidades on line». Funcionó durante cuatro años y llegó a tener 30 empleados, «varios premios, una buena comunidad de usuarios y grandes clientes corporativos». Y la vendió hace un año, poco antes de que le contratasen en ITV.
Sobre la posibilidad de regresar, dice que «en realidad nunca me he ido del todo». «Ahora que Oxford Street parece la Gran Vía por la cantidad de gente que huye de la crisis, quizás sea el momento de llevarme un poco de Londres conmigo a España, como para compensar, digo yo... No siempre van a ganar ellos».