Teatro para la integración

Chelo Lago consuelo.lago@lavoz.es

PONTEVEDRA

21 oct 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La reconocida actriz Blanca Marsillach estuvo ayer en el centro Juan XXIII para escenificar la obra El Reino de la Tierra, de Tennessee Williams. Junto a ella, encima del escenario, estuvieron los también actores Carlos Martínez-Merón y Xabier Olza. Se trata de una iniciativa para la integración plena en la sociedad de las personas con discapacidad que se está presentando en distintos centros de toda Galicia. El proyecto está dividido en tres partes diferenciadas. En la primera, la actriz ofrece a los espectadores una pequeña introducción sobre el autor de la obra. Luego se escenifica la obra y para terminar, los actores que intervienen responden a todas las preguntas que les hacen los espectadores, que son invitados a subir al escenario, convertido así en una herramienta en la formación de la seguridad y autoconfianza de las personas con discapacidad. La obra se escenificará ante quince asociaciones gallegas relacionadas con la discapacidad.

Del teatro nos pasamos a la música para dar cuenta del primer curso de DJ organizado en la ciudad, con la colaboración del Centro Comercial Urbano Zona Monumental, en cuyo ámbito figuran un buen número de los locales de copas de la ciudad en los que la música es uno de sus reclamos, como indicó su presidente, Miguel Lago Rey. El Pazo da Cultura acogerá esta iniciativa, que impartirá un reconocido especialista a nivel internacional, Danni Rivera, director de la escuela de dj's Next DJ y recién llegado de Miami de hacer una sesión. El experto subrayó que se trata de «una profesión en alza» y que cursos similares hace unos años eran «impensables e inviables». Indicó que el mundo del DJ en general «va más allá de poner discos». «Hay que saber actuar delante de la gente, hacer un poco de psicólogo y saber llevar una pista de baile, saber qué tipo de público tienes enfrente, qué tema poner en cada momento y situación, saber un poco de sonido, del porqué de las cosas, y la historia, que ya se puede hablar de historia de la música electrónica desde que empezó en los años 70 en estados Unidos, que ha ido evolucionando hasta ahora mismo que es una corriente que mueve mucha gente». Aunque Rivera suele pinchar música electrónica, pretende abarcar todos los ámbitos en este curso, «desde el que pincha en una boda hasta el que lo hace en un local más de música española o comercial, enseñar a los alumnos a desenvolverse en cualquier tipo de campo al que quieran dedicarse».

Hasta el momento hay ya formalizadas 17 solicitudes, tres de ellas firmadas por mujeres, de las que Rivera dijo que «cada vez hay más y de una gran calidad, porque tienen una sensibilidad especial para la música. Yo trabajé con algunas que ganan muchísimo dinero en esta profesión». El curso se iniciará el próximo lunes, 25, a las 19 horas, en el Pazo da Cultura. El precio de la matrícula es de cien euros. Los alumnos contarán con « los mejores equipos, desde el más básico a los mejores que existen en la actualidad en las pistas de baile», como indicó Javier Pazos, gerente de la empresa Jamaraudio. El curso tendrá una duración de 16 horas y está dirigido tanto a profesionales de la hostelería como a los que quieran introducirse en este mundo. Destacó que es la primera vez que se realiza en Pontevedra un curso de estas características, «que puede dar opciones de trabajo a gente que hoy está en el paro». «Haremos un curso básico y de perfeccionamiento: al que sabe, se les enseñarán algunas prácticas para mejorar, y al que no, partimos de cero». Además, tendrán un técnico de sonido profesional, Ricardo Barroso, que hizo giras con muchos grupos, entre otros Extremoduro o Ella Baila Sola, que enseñará el funcionamiento de una mesa de sonido a nivel más profesional.

Ayer tuvo lugar un homenaje a Paz Lamela Vilariño con motivo de su jubilación como inspectora de Educación. En la comida, que se celebró en las instalaciones del Liceo Casino en A Caeira, estuvo arropada por sus compañeros, ya que el acto no fue abierto por expreso deseo de la protagonista. Paz Lamela empezó su labor profesional en la Inspección de Pontevedra en el año 1977, interrumpiéndola en el 83, cuando fue nombrada directora Xeral de Política Lingüística, para regresar a su puesto en el año hasta el 87. En 1990 vuelve a la Xunta, esta vez como directora Xeral de Cultura, para volver a Pontevedra cuatro años más tarde, donde continuó con su trabajo hasta ayer mismo. En su etapa en la Xunta con Gerardo Fernández Albor y Manuel Fraga Iribarne como presidentes del ejecutivo, tuvo como jefes inmediatos a Vázquez Portomeñe y Daniel Barata, quién, por cierto, estuvo en la comida, como también los ex conselleiros Celso Currás y Manuela López Besteiro.

En el entrañable acto, que la protagonista aguantó «emocionada pero serena», hubo tiempo para recordar su compromiso con la cultura y el idioma gallego. Durante su época en la Xunta se hicieron los primeros decretos que desarrollaron la Ley de Normalización Lingüística, Ley 1/1983, se elaboraron campañas de impacto, como la de la embarazada con el lema Fálalle galego, o se convocaron numerosos cursos de gallego para funcionarios y trabajadores en general, además de diversas iniciativas para promonar la cultura gallega dentro y fuera de la Comunidad. Sus compañeros, entre los que no faltaron el inspector jefe, Manuel Torres, y el jefe territorial, César Pérez Ares, le regalaron un reloj.

De un homenaje celebrado a otro que se va a celebrar. Nos referimos al que la Federación de Asociaciones de Vecinos Boa Vila rendirá el día 30 al desaparecido doctor Miguel Domínguez, fundador del hospital que lleva su nombre. Y es que sus promotores tuvieron que colgar el cartel de completo y anuncian que no se admitirán más personas en la comida, por estar cubierto todo el aforo de la finca Batacos, donde se celebrará. Solo en el caso de producirse alguna baja, se podrá ocupar su lugar llamando al 686 017 457 a partir del día 27.