Un piano de cuatro mil pesetas

La Voz

PONTEVEDRA

ANDRÉS SOLLA

Praza da Ferrería La Sociedad Filarmónica conserva el primer piano de cola que hubo en Pontevedra y que compró tras su fundación. El «Blüthner» lo estrenó Marta Leman en 1921

21 oct 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

La Sociedad Filarmónica guarda como oro en paño -no es para menos- desde 1921 un imponente piano de cola que en el citado año de su fundación se trajo de Hamburgo y cuya historia recordaron ayer el presidente de honor de la entidad, José Luis Fernández Sieira y el actual, José Fontoira. Al parecer, el instrumento, que además fue el primer piano de cola que hubo en Pontevedra, costó cuatro mil pesetas de las de entonces y, para financiarlo, se acordó hacer una suscripción entre los primeros socios mediante la adquisición de bonos reintegrables sin interés al precio de 25 pesetas cada uno, como anticipo a la Filarmónica. Sucedió, según cuenta Sieira, que ni de lejos se llegaba a las 3.000 pesetas del piano y a las 1.000 del seguro y porte desde la ciudad alemana, hasta que el marqués de Riestra se ofreció para comprar todos los bonos necesarios. Así, un 27 de octubre de 1921, en un concierto a beneficio de la sociedad, la pianista Marta Leman pudo estrenarlo acompañando a su marido, el violinista Manuel Quiroga. Hasta la llegada del Blüthner sólo había en la ciudad un piano vertical, el de las Mendoza, curiosamente el único de estas características que tocó en su trayectoria el prestigioso Arthur Rubinstein, en el recital que ofreció en Pontevedra en 1918. A salvo del incendio Pese a sus 84 años, hay que destacar que el piano está en perfecto estado y afinado. De hecho, lo utilizan los artistas que trae la Filarmónica para realizar ensayos, ya que está situado en el local que la sociedad tiene en los bajos del Principal. Y además, puede presumir de buena fortuna. El piano consiguió salvarse del devastador incendio de 1985 gracias a que en aquel momento estaba cedido al Conservatorio. El que se quemó en el Principal fue otro que había sido cedido por la Comisaría General de Música del Ministerio de Cultura a la Filarmónica. Cuando en el Conservatorio dispusieron de otro piano de cola, el Blüthner volvió a casa. Programa Junto al emblemático instrumento, Fontoira y Fernández Sieira dieron a conocer ayer el programa de la nueva temporada de la entidad, que hace la número 85 y que comenzará este próximo lunes con el recital de la Orquesta Filarmónica de Targu Mures en el Pazo da Cultura. Hasta mayo habrá trece actuaciones, entre ellas las de tres cuartetos de cuerda, dos tríos con piano y dos pianistas, para acabar de nuevo con otra orquesta. «Siempre pretendemos -señala Fontoira- traer alguna orquesta, aunque nuestras posibilidades son limitadas. Por eso preferimos también contratar música de cámara, que es lo que realmente no se ve en Pontevedra». El presidente destacó entre los conciertos el que ofrecerá el pianista Miguel Baselga (12 de diciembre), así como la ganadora del Concurso Sarasate de este año, la coreana Je-Hye Lee (13 de marzo). También anunció que por primera vez en la ciudad se interpretarán en un recital las cinco sonatas para violonchelo y piano de Beethoven. Lo harán Jiri Barta y Jan Cech el 20 de febrero. Ambos presidentes destacaron que después de 85 años, la sociedad puede presumir de buena salud. En la actualidad, cuenta con setecientos socios, que pagan una cuota trimestral de 22 euros. Aunque quizá la asignatura pendiente está en la gente joven. «Pensábamos que al crearse las facultades iban a venir más jóvenes pero no ha sido así; quizás están más por la música electrónica». Pensando en esta afición, la Filarmónica programa una vez cada dos años un concierto de jazz. Y de la música pasamos a la literatura y, en concreto, a Nélida Piñón, que ayer recibió el Príncipe de Asturias. El Concello de Cotobade, en el que Piñón tiene sus raíces, felicitó a la autora por esta nueva distinción. El alcalde, Manoel Loureiro, y la edila Lina Garrido, quisieron estar en Oviedo, aunque no les fue posible. «Queremos trasladarche a satisfacción e orgullo que sentimos polo meritorio recoñecemento á obra da nosa paisana e que saibas -subrayaron en una misiva a la escritora- que co sentimento estamos contigo». Seguro que la muestra de cariño le ha llegado.