Cuatro concellos del PP, PSOE y BNG apuestan por descentralizar el catastro

A. C. PONTEVEDRA

PONTEVEDRA

Poio, Lalín, Catoira y Moaña, primeros ayuntamientos que apoyan la creación de una estructura comarcal Cuatro concellos, dos de ellos gobernados por el PP, uno por el BNG y otro por el PSOE, acaban de apostar formalmente por lograr la descentralización del catastro. Los concellos de Poio, Lalín, Moaña y Catoira se adhirieron a la propuesta de convenio Diputación-catastro por el que las oficinas comarcales del Organismo Provincial de Recaudación (Oral) pasarían a facilitar la realización de determinados trámites del catastro. De esta forma, los contribuyentes no tendrían que acudir a Vigo y Pontevedra necesariamente cada vez que se plantean trámites elementales, como la baja de un inmueble.

23 jun 2000 . Actualizado a las 07:00 h.

El consejo del Oral aceptó esta misma semana las adhesiones de los primeros cuatro concellos al convenio que la Diputación pretende llevar a cabo con la Dirección General del Catastro, a fin de implantar la descentralización. Uno de estos concellos está gobernado por el BNG _Poio_, otro por el PSOE _Catoira_ y dos por el PP _Lalín y Moaña_, circunstancia que parece predecir que no habrá obstáculos políticos desde las instituciones locales. Fuentes próximas al Oral indicaron que hay ya «muchos más concellos» que se están planteando su adhesión al convenio, si bien no se facilitaron los nombres de los mismos. La pretensión de este organismo es que en las cabeceras comarcales de su red de recaudación se puedan tramitar altas y bajas de inmuebles en el catastro, así como otras formalidades, sin necesidad de acudir a las oficinas centrales de Pontevedra y Vigo. Desde la Diputación se asegura igualmente que el Oral estaría en condiciones de hacerse cargo igualmente del mantenimiento catastral, incluidas las revisiones y fotos aéreas necesarias para tener al día las relaciones de inmuebles que sirven luego de base para el pago del IBI. El Oral está instalando un potente sistema informático que permitiría afrontar la descentralización del catastro, además de la transmisión de datos para que los ayuntamientos conociesen en tiempo real la marcha de la recaudación del IBI en su municipio. Aunque no está decidido plenamente, se cree que, de la docena de oficinas de este organismo recaudador, al menos ocho estarían posteriormente en situación de realizar los trámites catastrales.