«Las carreteras de esta zona no pueden continuar así»

sindo martínez VERÍN / LA VOZ

VERÍN

Santi M. Amil

Julio Rodríguez, cura de Campobecerros, lidera la protesta vecinal por el mal estado de los viales en Castrelo do Val

02 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

No es frecuente ver a un sacerdote encabezando una protesta vecinal. El motivo de que el veterano párroco de Campobecerros, ubicado en plena montaña verinense, Julio Rodríguez López, optase por ser uno de los promotores de una movilización es lo que califica de «degradación de la calidad de vida de una aldea». El pequeño pueblo, de 80 vecinos, en el que el religioso lleva trabajando 33 años, está vinculado estrechamente al ferrocarril y cuenta con una estación desde hace décadas. Ahora, las obras de la alta velocidad están destrozando todos los viales de la parroquia y de los núcleos vecinos, y lastrando el día a día de una zona venida a menos por la despoblación y el envejecimiento. Rodríguez comandó el jueves el malestar de los lugareños contra el pésimo mantenimiento de unas vías que suponen, según el sacerdote, un enorme riesgo para los habitantes del lugar.

«El estado de los viales afecta a todos los vecinos. Una ambulancia, por ejemplo, no tiene por qué andar sorteando socavones cuando traslada a un paciente, no es algo normal. Tampoco es lógico que se vea condicionado el transporte escolar o el tránsito de muchos vecinos que van a Verín a hacer compras o trámites. El estado de la comarcal OU-114 es un auténtico peligro. La carretera no puede continuar así», asevera el religioso. «No se solventa el problema echando un poco de cemento para tapar algunos socavones. Así no se arregla esta situación», sentencia el sacerdote.

Habrá más protestas

«Afirman que bachear los siete kilómetros de la comarcal en peor estado costará 700.000 euros, pero, ¿dónde está el resto del dinero para arreglar otros casi 20 kilómetros llenos de baches?», expone. Y remarca: «Prometen que lo van a hacer, pero después de lo visto, desconfiamos».

Rodríguez López recuerda que la tesitura no es nueva. «Llevamos cinco años así y no vamos a aguantar más. Queremos que se arreglen no solo los baches, sino que se reponga adecuadamente el firme», advierte el sacerdote. Las peticiones de reforma integral afectan a otras vías locales, como los que van hasta Vendas da Capela, Bolaños y Portocamba. En muchos puntos de esas carreteras hay que circular a menos de 30 kilómetros por hora.

El religioso defiende que Adif no obró de buena fe con esa aldea. «Fui a hablar con ellos hace tiempo y aseguraron que repararían los desperfectos que causasen. No está siendo así», resume. ¿Habrá nuevas movilizaciones? «Si esto continúa así, no lo descartamos», asevera el religioso.