Ana Isabel Fernández y Pedro Wald son los propietarios de Grilier, empresa heredera de la tradición de un pequeño pueblo de Celanova
21 feb 2019 . Actualizado a las 08:17 h.La empresa está dando sus primeros pasos, pero la idea se remonta siglos y siglos atrás. Vieron en la tradición una oportunidad de negocio y decidieron no desaprovechar la oportunidad. Ana Isabel Fernández y Pedro Wald son matrimonio y socios de la empresa Grilier. Ella es natural de Orbán en el concello de Celanova, lugar donde comenzó todo. «Este proyecto nace como lo hacen todas las tradiciones familiares. En este caso en la aldea de mi mujer. Su abuelo solía ahumar chorizos y la familia, los tíos de Isabel, a modo de broma como si fuese un juego hicieron en el proceso de ahumado algunas modificaciones con resultados muy curiosos, solo por probar». Esa historia fue pasando de generación en generación y en una comida familiar, muchos años después, retomaron la idea. «Vimos que funcionaba muy bien y básicamente decidimos llevar esta historia a un producto que fuese más fácil de usar y más cómodo», explica Pedro.
De esto hace mas de dos años, aunque la empresa comenzó a caminar hace uno en Gondomar (Pontevedra). Antes tuvieron que formarse y aclarar dudas. Primero lo hicieron en un incubadora del espacio coworking de Celanova, fruto de la colaboración entre el Escuela de Organización Empresarial y el Igape, donde dieron los primeros pasos relacionados con la estrategia comercial. Tras terminar esta etapa se animaron a presentar el proyecto a una aceleradora, Viagalicia , «donde nos tomaron como un diamante en bruto y nos pulieron», explican. Viagalicia es un ecosistema para emprendedores promovido por la Zona Franca de Vigo y la Xunta de Galicia. Allí encontraron soporte y asistencia en su fase inicial, capital semilla, formación, infraestructuras y asesoramiento intensivo. Ha servido para pulir el producto, preparar las estrategias de márketing y testar el mercado, ya que es un producto nuevo. Y ahora la empresa es una realidad.
Grilier es una alternativa de sazonado para barbacoa. Son bloques que se colocan sobre las brasas e impregnan la comida de sabores. Afirman que la singularidad del producto no solo radica en su inspiración en la alta cocina, la manufactura artesanal o el formato en el cual se presenta, sino en que es saludable ya que solo cuenta con ingredientes naturales, hierbas aromáticas. E indican que es ideal para cualquier dieta.
«En comparación con un sazonador tradicional, al ser humo no tiene ni grasas ni calorías, no tiene sal, ni azúcar, ni gluten por lo tanto es compatible con cualquier tipo de dietas. Son ingredientes de origen vegetal, lo que haces es echarlo sobre el carbón justo antes de poner la carne y emana un humo que le da sabor a los alimentos. La paradoja es que si bien es un producto innovador está basado en algo muy antiguo que es el ahumado de los alimentos», dice el propietario de Grilier.
Los socios emprendedores fueron conscientes desde el principio de que la barbacoa no es una forma de cocinar que se utilice en Galicia. «Aquí la gente es más propensa a ir a comer un churrasco a un restaurante y no prepararlo en casa», relatan. Pese a todo hicieron algunas pruebas de mercado. Acudieron a la feria Etiqueta Negra de Pontevedra el pasado mes de noviembre, centrada en productos gourmet. «Hubo bastante asombro y gente que al ver nuestro producto pensaba que vendíamos otra cosa como pan de maíz o barras energéticas. Pero una vez que les explicamos lo que era tuvo muy buena aceptación. Nos sorprendió bastante».
La comercialización del producto culinario la hacen a través de su página web y de Amazon para Francia, Alemania, Inglaterra, Italia, México, Canadá y Estados Unidos. Zonas donde las barbacoas son más comunes que en Galicia.
De momento Grilier es un producto que tiene cuatro variedades (dependiendo de las hierbas aromáticas que se utilicen) y los propietarios piensan en ir sacando otras a la espera del resultado de las primeras. De momento se pueden probar las de romero y salvia, orégano, albahaca y tomillo y eneldo. Incluso afirman estar abiertos a explorar otras opciones que vayan relacionadas con la filosofía que tiene la marca: «Comida sana y volver al origen».