Marcos Martín, director general de Viaqua, reflexiona sobre los retos que trae el nuevo año
03 ene 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Dos años después, seguimos inmersos en esta dolorosa pandemia que continúa llenando de incertidumbre nuestras vidas. Vino de repente, y pensábamos que se iba a ir igual, pero parece que será algo con lo que tendremos que aprender a convivir.
El cambio climático es mucho más sibilino. Avanza a un ritmo que, para la escala temporal humana, nos resulta poco apreciable. A la humanidad nos está pasando como a la rana de la fábula que poco a poco se cuece sin llegar a saltar de la olla. Recientemente se estrenaba Don´t Look Up, y no podía dejar de ver el paralelismo entre el meteorito de la película y el cambio climático… incluyendo las hordas de negacionistas que ignoran las evidencias científicas y que arengan a «no mirar». La ciencia es la única arma efectiva que tenemos para luchar contra los grandes retos globales. La I+D+i no es una opción, es una necesidad. Lo hemos visto recientemente en el desarrollo de las vacunas del covid-19, y será igual para afrontar los retos de adaptación y mitigación del cambio climático.
Viaqua es una organización ambidiestra y, por tanto, no solo nos preocupamos de prestar el mejor de los servicios hoy, sino que, al mismo tiempo, nos esforzamos por mejorar y desarrollar el mejor de los servicios de mañana. Esta convicción nos lleva a: dedicar importantes recursos a la I+D+i asociada al agua y el medio ambiente, promover la innovación abierta, y explorar constantemente nuevas fórmulas y modelos de colaboración.
Un ejemplo de estas alianzas es el de Cetaqua Galicia, el Centro Tecnológico del Agua en el que somos patronos con el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), y la Universidad de Santiago de Compostela. Precisamente en octubre, celebramos su décimo aniversario y su consolidación como referente nacional y europeo, siendo el único centro de apoyo a la investigación especializado en agua acreditado en nuestro país.
Otro claro ejemplo lo constituyen las Unidades Mixtas creadas conjuntamente con Cetaqua y la Xunta de Galicia a través de la Axencia Galega de Innovación (GAIN). Precisamente esta semana cumplían 6 años de unidades mixtas y clausurábamos la Unidad Mixta Cigat Biofactoría, ubicada en Ourense. La Biofactoría es el concepto que surge al transformar las depuradoras de aguas residuales convencionales, aplicando modelos de economía circular y residuo cero a sus procesos. Supone romper con el paradigma del modelo consumista de usar y tirar, extrayendo y aprovechando todos los recursos disponibles en las aguas residuales: agua, arenas, grasas, fangos, energía... Se han conseguido desarrollar dos nuevas patentes asociadas a este concepto, demostrando la viabilidad técnica, económica y ambiental de la producción y recuperación de compuestos de alto valor añadido, como son los Ácidos Grasos Volátiles y los Polifenoles, a partir de corrientes residuales. Es decir, supone un importante paso hacia delante para la implantación de modelos de economía circular que permitan procesos y empresas más sostenibles, pero también, más competitivas. Esta Unidad Mixta constituye un magnífico ejemplo de colaboración público-privada. Termina, pero no nuestro propósito de seguir sumando. Ya tenemos en marcha dos nuevos proyectos con más de 7 millones de financiación europea, el proyecto Ecoval y el Walnut, que continuarán desarrollándose en la Biofactoría de Ourense. Adiós al 2021, y mis mejores deseos de un 2022 más feliz y sostenible.
Marcos Martín es director general de la compañía Viaqua
