Xinzo, sin charangas: «Bótase moito de menos tocar»

Miguel Ascón Belver
miguel ascón OURENSE

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La Charanga Achicoria, en Xinzo, en una imagen de archivo
La Charanga Achicoria, en Xinzo, en una imagen de archivo CEDIDA

Grupos locales como Achicoria se resignan a un extraño entroido en silencio en la capital de A Limia

16 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

En condiciones normales, las charangas acaparan el protagonismo en el entroido de Xinzo y se hace raro ver las calles de la localidad en silencio en días como estos. «Os que somos de aquí estamos esperando estas festas durante todo ano», explica Jorge Gándara Antoñón, miembro de la charanga Achicoria, una de las más veteranas y valoradas de A Limia. Según explica, para otros grupos lo normal es renovar el repertorio de cara al verano, pero los de Xinzo tienen como referencia el entroido. Todo allí gira en torno a estas fiestas.

«Somos todos moi entroideiros, pero hai que ter sentidiño, como tantas veces se está dicindo este ano», explica Jorge Gándara, de 31 años. Achicoria estaría actuando de forma intensa si hubiese carnaval porque la comisión y el Concello nunca se olvidan de los grupos locales. «Normalmente somos nove, salvo no entroido de Xinzo, que somos uns quince. Eses días so actuamos aquí, menos o xoves de comadres, que imos de mañá a Verín e de tarde a Viana do Bolo. Esta é a época do ano que máis estás esperando», explica.

Así fue el año pasado, pero al poco tiempo estalló la crisis del coronavirus y todo se paró. Achicoria tenía previsto actuar en las Fallas de Valencia pero tuvieron que suspenderlo y en verano, cuando se retomó la actividad, casi no se organizaban fiestas. «Un ano normal teriamos cincuenta actuacións no verán, pero esta vez só tivemos cinco», explica Jorge, que lamenta también la suspensión de la fiesta del décimo aniversario de la charanga, que debía haberse celebrado en el pasado puente de la Constitución. «Bótase moito de menos tocar. Bótase de menos incluso o xuntarnos entre nós. Ninguén vive disto, é un hobby divertido. O que está nunha charanga é que o quere pasar ben», resume.

Jorge espera que el esfuerzo de contención que supone no celebrar el entroido tenga su recompensa: «A xente está comportándose bastante ben, pero todo o mundo ten pena de que non se poida celebrar porque botas o ano enteiro esperando, chegou o momento e non puido ser».