Los trabajadores del sector del comercio textil quieren revisar un convenio que data del 2009

La Voz OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Santi M. Amil

La mesa negociadora exhibe dos realidades, trabajadores de firmas generales y empresas de comercio tradicional

08 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Los 1.800 trabajadores del sector del comercio textil de la provincia no han encontrado eco en la patronal a la hora de reclamar la actualización de su convenio. Se firmó en el 2009 y formalmente se aplicaba un año más. Gracias a una salvaguarda incorporada en su redacción, mantiene su vigencia, aunque sin actualización de salarios ni beneficios sociales, que en algunos casos, según indican fuentes sindicales, están superados por los cambios legislativos de los últimos años. Rotas las negociaciones entre patronal y sindicatos, las centrales sindicales CIG. UGT y CC. OO. iniciarán esta misma tarde un plan de movilizaciones, con el fin de presionar a los empresarios del sector para que se sienten a negociar la revisión del convenio.

La situación, según subrayan en medios sindicales, es especialmente compleja en la medida en que los delegados que ostentan la representación de los trabajadores son en gran medida empleados de las grandes firmas del sector, donde se celebran elecciones. Por la parte empresarial, sin embargo, son empresarios tradicionales del comercio local los que negocian la revisión del convenio. Los puntos de partida son muy distantes, pues la situación de unos y otros también es muy diferente.

Fuentes sindicales apuntan, en este sentido, que, de no producirse aproximaciones y avances a corto plazo, tratarán de llegar a la dirección de las grandes empresas para que se impliquen en este inesperado conflicto.

El sector del comercio textil muestra en Ourense la fuerza que en conjunto aportan las cadenas y firmas punteras, en la medida en que desde la negociación del último convenio se ha producido un aumento del número de trabajadores. Esta situación es, dicen, consecuencia de la normalización de los contratos laborales ordinarios en ese tipo de tiendas grandes. Ha caído, al mismo tiempo, la cifra de falsos autónomos que en algún momento suponía, de acuerdo con las mismas fuentes, un notable porcentaje de la ocupación.