«Pagamos lo que sea, pero nunca dejamos de comerlo»

Maite Rodríguez Vázquez
maite rodríguez OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Santi M. Amil

Los clientes ourensanos aceptan las subidas moderadas del pulpo, que sigue teniendo precios bastante

20 may 2018 . Actualizado a las 12:57 h.

El pulpo á feira sigue teniendo un precio bastante popular en el ámbito que le da nombre a la receta, la feria. A ocho euros la ración lo vendía esta semana la Pulpería Tinoco de Celanova en la Romaría Raigame de Vilanova dos Infantes. Pero reconocen que el producto está subiendo en origen desde hace meses y que las raciones van por ello algo más pequeñas para mantener este precio. Al lado, Carmen, de la Pulpería Aurora de O Carballiño, apunta que la subida se puede ver en los precios de la lonja. «A vinte euros o kilo, e iso sen limpar e sen merma. Estamos aguantando e palmando para telo a nove euros a ración, porque a xente non dá asumido as subidas», sostiene la pulpeira. Entre los clientes, hay opiniones para todos los gustos. Margarita Parada y su marido no notan mucha variación en las raciones y aceptan las subidas de precio. «Dá moito traballo. Hai que mirar que o hai que pescar, haino que lavar, cocer e pagar os postos. Eu encontro o prezo normal», dice la mujer. Son de Monforte, pero están emigrados en Suiza y no se van a quitar el capricho de comer el pulpo cuando vienen por un euro más la ración. En otro grupo, Marina Tallón recuenta las últimas subidas. «Subiu desde setembro para aquí, estaba a sete euros, logo a oito e agora, a nove. O polbo que comemos xa non é das rías». «Pero estaba moi bo», replica su compañero de mesa. «Si vas a comer el pulpo gallego en sitios que montaron empresarios de Ourense en Asturias está bastante más caro, con lo cual somos unos privilegiados y las raciones son abundantes. Pagamos lo que sea, pero nunca dejaremos de comer el pulpo», sentencia Luis Badiola. «O que cobran por unha ración é o que lles costa a eles conxelado, pero non vamos deixar de comer polbo», tercia Juan José Andrade. En otra mesa, opinan que el precio debe ser «justo». Un cliente dice que hay quienes se aprovechan de las subidas, que el pulpo lo compran en Marruecos en grandes cantidades y que luego en las raciones recortan en todos los ingredientes. «Se suben o polbo, polo menos que non baixen as racións. Pero se o seguen subindo seguiremos comeéndoo», opina Santiago Fagilde.