El Estado ignoró a funcionarios que querían examinar en la Diputación

Miguel Ascón Belver
MIGUEL ASCÓN OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Hubo solicitudes de trabajadores estatales, pero la Subdelegación no las envió

15 ene 2015 . Actualizado a las 05:25 h.

La inclusión de funcionarios ajenos a la Diputación en los tribunales de selección de personal para garantizar la imparcialidad de los procesos era una de las principales novedades del lavado de cara que el gobierno provincial quiso dar a su sistema de contratación. Sin embargo, cuando José Manuel Baltar quiso estrenar su nuevo modelo, ninguna administración pública respondió a su requerimiento para que aportasen un listado de técnicos disponibles para hacer de examinadores en sus oposiciones. Ahora se sabe que sí había funcionarios interesados, pero que sus solicitudes no fueron tramitadas.

Así ocurrió al menos en lo que respecta a la Subdelegación del Gobierno. Inicialmente sí se dio trámite a la petición de Baltar y desde las oficinas del parque de San Lázaro se envió un oficio a todos los departamentos de la administración periférica del Estado en la provincia para que los funcionarios que quisieran ser examinadores de la Diputación presentasen su correspondiente solicitud. En la Inspección de Trabajo fueron al menos dos personas las que así lo hicieron y sus escritos fueron remitidos a la Subdelegación del Gobierno.

Ana M. Rodríguez es una de ellas. Sabe, extraoficialmente, que su instancia llegó al parque de San Lázaro, pero asegura que le transmitieron que una «negligencia» hizo que no saliera de allí hacia la Diputación ourensana para que las tuviera en cuenta a la hora de designar sus tribunales de selección de personal. Le ocurrió a ella y a una de sus compañeras en la Inspección de Trabajo, pero teme que le haya pasado lo mismo a otros muchos funcionarios de la administración periférica del Estado.

«No es que nos importe mucho ir o no a los tribunales de la Diputación, pero lo que sí me molesta es que nos tomen el pelo», explica Ana M. Rodríguez, que anuncia la presentación de una queja por escrito para tratar de conocer los motivos exactos de lo ocurrido. «Esto huele raro. Quiero que me expliquen por qué no se dio trámite a mi solicitud», decía ayer la funcionaria estatal, que explicaba también que no tiene ningún interés especial en participar como examinadora en la oposiciones de la Diputación. Ese servicio supondría un ingreso extra como el que reciben los trabajadores que se prestan voluntarios para representar a la Administración en las jornadas electorales, por ejemplo. «Ni yo ni mi compañera somos de ningún partido», insiste.

El caso es que la institución presidida por José Manuel Baltar estrenó este lunes la elección por sorteo de los miembros de los tribunales de dos procesos selectivos, pero tuvo que realizarse exclusivamente entre la plantilla de la propia Diputación. Ninguna administración pública ha respondido a la petición formulada por José Manuel Baltar para que facilitasen la participación de sus funcionarios. No lo hizo el Estado, pero tampoco la Xunta, ni ninguna de las tres universidades. Tras leer en La Voz de Galicia lo ocurrido, Ana M. Rodríguez habló con responsables de la Subdelegación y descubrió que su solicitud no había sido tramitada.

Sin respuesta oficial

Este periódico se puso ayer en contacto con la Subdelegación del Gobierno para saber qué explicación oficial da al hecho de que no se tramitasen las solicitudes presentadas por los trabajadores estatales para participar como examinadores en las oposiciones de la Diputación. Desde las oficinas del parque de San Lázaro no pudieron dar una respuesta porque su secretario general, Manuel Arias, está ahora mismo de vacaciones y no volverá hasta la próxima semana.