Su portavoz, Xosé Somoza, anticipa que harán una labor constructiva
27 nov 2012 . Actualizado a las 07:20 h.Con el traslado de los despachos de la sala noble a los sótanos municipales. Así materializó ayer el BNG su transición de formar parte del gobierno de Ourense a ser un grupo más de la oposición. La mudanza al espacio reservado tradicionalmente para los grupos opositores no fue traumático para los tres ediles nacionalistas, ya que salvo Xosé Somoza -director xeral de Rehabilitación- ninguno de ellos había llegado a formar parte del gobierno municipal. La nueva etapa del BNG en la oposición estará marcada, según indicó su portavoz Xosé Somoza, por tratar de aportar su programa a la institución municipal: «Imos a facer unha labor construtiva, que trate de incorporar as propostas nacionais do BNG».
Reparto de áreas
Xosé Somoza compareció acompañado por las dos nuevas edilas que están pendientes de formalizar su incorporación al Concello de Ourense, Susana García y Ximena González. Pese a ello, Somoza explicó que ya se han repartido las principales áreas municipales. Así, el portavoz se encargará de todos los temas relacionados con el urbanismo y la elaboración del nuevo PXOM. Los asuntos de temática social serán responsabilidad de Ximena González, mientras que Susana García se encargará del área económica.
El nuevo local del BNG está situado en los sótanos del Concellos. Se encuentra puerta con puerta con el de Democracia Ourensana y abrirá de 8.00 a 14.00 horas. «Era o espazo que queríamos e na zona do concello que queríamos, ao igual que o resto de grupos da oposición», concluyó Somoza.