Los servicios de Down ourense se inician con el apoyo a los padres que tienen que enfrentarse con la primera noticia de la existencia del síndrome. El trabajo con las familias se mantiene siempre en paralelo a los servicios para los propios usuarios «porque si se quiere conseguir esa autonomía personal, que nosotros nos fijamos como meta, es muy importante la concienciación y la implicación del entorno más próximo», explican los técnicos. Es la escuela de familias. La estimulación precoz y psicomotricidad se trabaja también de forma personalizada prácticamente desde el nacimiento del bebé y durante toda su etapa de formación. Down Ourense se apoya además en el convenio que a nivel gallego tiene este colectivo con la Consellería de Educación para la inclusión escolar.
Apoyo en toda la provincia
El trabajo de los técnicos del colectivo no se limita a las terapias con los usuarios asociados. También ofrecen apoyo externo. «Hay colegios en la provincia que tienen alguna persona con síndrome de Down que nos llaman para que les ayudemos en la sensibilización tanto del profesorado como el resto de alumnos que van a compartir las clases; y nosotros vamos siempre porque nos parece que es parte también de nuestra tarea», explica la presidenta Carmen Vila. El siguiente escalón del trabajo del colectivo es la formación laboral. «Nuestra prioridad es la formación en el entorno y si hay un curso de informática que organiza por ejemplo el Concello nosotros vemos si a alguno de nuestros chicos le apetece y puede encajar en esa formación, y le inscribimos», señala la repsponsable. Down trabaja también la inclusión laboral en empleo con apoyo desde el 2006.