El profesor Claudio Cerdeiriña, que encabeza el grupo de firmantes del los dos recursos ahora ganados, dice que la Justicia puso las cosas en su sitio: «A nuestro juicio lo que se hizo en el 2009 violaba las propias normas de la Universidad de Vigo. Hubo un recurso del Juzgado Contencioso Administrativo 2 de Vigo que entonces dio la razón a la Universidad. Que ahora el TSXG le haya quitado la razón a la Universidad está muy bien porque aquello se había hecho mal» hacerlo bien». Cerdeiriña dice que esta sentencia sostiene que el Consello de Goberno de la Universidad encargue a la Junta de Titulación de Física el plan de estudios del plan de Física adecuado al Plan Bolonia. «Habíamos empezado aquel año a hacer la memoria de nuestro grado y después vino aquella famosa Junta de Facultad, de la noche para la mañana, donde se cambió todo».
«Decir que la junta de titulación de Física no existe o puentearla era la única forma que tenían para cambiar Física por Ambientales», indica este físico.
Dos catedráticos
Luis Romaní, catedrático, está satisfecho: «Se nos da la razón, desde el principio dijimos que el procedimiento era ilegal y nos dan la razón en todo. El Consello de Goberno no debió haber encargado la transformación de Física a la junta de la facultad sino a la junta de titulación porque este es el órgano facultado para esto».
Recuerda Romaní que habían sido informados y advertidos el conselleiro, de Educación, el rector y el decano de Ciencias. «Siguieron adelante y ahora hay una sentencia que nos da la razón. El proceso estuvo viciado», añadió.
Dice este catedrático que el cambio de titulación «fue un disgusto para todos nosotros, que estábamos muy comprometidos con Física, todo nuestro horizonte profesional estaba en una titulación que se nos ha quitado de una manera no legal. Para mí, que soy el profesor más antiguo, fue el mayor disgusto profesional de mi vida».
Intereses
El otro catedrático, Humberto Michinel, que ayer se encontraba en Valencia, explicó que «se puenteó a la junta de titulación de Física a sabiendas para que el cambio lo aprobara la junta de facultad, que tenía otros intereses. Ahora habrá que rehacer el proceso. Yo creo que el recurso tiene pocas posibilidades», señaló. Michinel piensa que quienes más se pueden ver afectados en todo esto son los alumnos del nuevo grado de Ciencias Ambientales, que ya va por su segundo curso en la facultad ourensana.