Facilitar los accesos a la zona termal de la margen derecha del Miño es el objetivo en el que trabaja el Concello de Ourense. La inminente apertura del balneario de Outariz agudizará las dificultades que ya tienen actualmente los ourensanos y turistas para llegar a las termas públicas. El nuevo complejo termal, situado a unos doscientos metros de las pozas gratuitas, se encuentra en una zona de difícil acceso, ya que los aparcamientos más próximos están en el Muíño das Veigas y en la margen izquierda del río, a la altura de la pasarela.
Conscientes de que esta carencia podría reducir el atractivo turístico del nuevo balneario, la tenencia de alcaldía del Concello de Ourense trabaja en la búsqueda de soluciones, que llegarán en forma de dos aparcamientos públicos. El primero se situará en la margen izquierda del Miño. Con los trámites administrativos avanzados, el estacionamiento servirá para evitar el colapso que sufre la actual zona de aparcamiento y que provoca que sean muchos los coches situados en los arcenes carretera. Relacionado con esta actuación, se encuentra la ampliación de la línea de autobús urbano -actualmente llega hasta la localidad de Reza- que mejorará la conexión con las termas a través del transporte público.
El segundo estacionamiento público se construirá en las proximidad del nuevo balneario. Según indicó el teniente de alcalde, Alexandre Sánchez Vidal ya se iniciaron las conversaciones con el Ministerio de Fomento y están redactados los proyectos de una exigencia de los usuarios habituales de esta área termal: «Trátase de complementar os servizos que aínda non existen na zona».
La mejora de los accesos a Outariz fue anunciada ayer por el teniente de alcalde, Alexandre Sánchez Vidal, durante una visita a las obras del futuro balneario, que se encuentran en su recta final. Según el político del BNG, estará abierto al público en el horizonte de dos meses. El recinto termal, que fue iniciado por el anterior gobierno del Partido Popular, vendrá a completar la oferta de pago que ofrece actualmente A Chavasqueira y será explotado por la misma empresa, Ibernisha. «Xa ten unha maior envergadura do que hoxe temos na Chavasqueira. Ten unha oferta no plano termal máis completa», indicó Sánchez Vidal.
Inspiración japonesa
El nuevo complejo, que estaba previsto que se inaugurase el pasado verano, se sitúa en una parcela de cuatro mil metros cuadrados. La instalación se asienta sobre una planta baja que alberga el balneario y una superior de madera, donde estarán los servicios para atender a los visitantes.
En la planta inferior habrá dos jacuzzis, cinco piscinas de agua caliente, tres vasos interiores, seis chorros de gravedad, cañones de agua, una terma, una sauna, quince metros cuadrados de superficie radiante de relax y ocho duchas para el choque térmico. En el exterior habrá cinco piscinas más. Al igual que A Chavasqueira el recinto tiene inspiración japonesa, tanto por su estilo de baños como por los planteamientos constructivos: madera, losas de pizarra, cantos de río, vegetación autóctona, piscinas naturales son los condimentos que complementarán un caudal de ocho litros por segundo de aguas que saldrán a unos sesenta grados.