La tradición vence a los moros

OURENSE

El popular «Combate de mouros e cristiáns» de A Saínza congregó a miles de personas en la romería de Rairiz de Veiga

24 sep 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

La historia la escribieron siempre los vencedores, y contra eso nada se puede. El esquema es de sobra conocido, el desenlace ya no digamos, y aún así la romería de A Saínza y, de forma más que destacada el Combate de Mouros e Cristiáns, atrae cada año a miles de personas que se acercan hasta Rairiz de Veiga para participar en esta incruenta batalla.

A fuerza de ser sinceros hay que reconocer que la organización trata de mejorar en cada edición la puesta en escena de la batalla y los diálogos para tratar de acercar a lo políticamente correcto una cita que, hace años, podía herir susceptibilidades. Los mouros tuvieron, como en los últimos años, su momento de gloria en la noche del sábado, con la toma del castillo y su particular victoria parcial de la batalla. Aunque la llegada del domingo y el combate marcaron de nuevo una realidad incuestionable: la victoria de los cristianos sobre las huestes de los infieles. Y es que, como recuerda Xosé Xaquín Rodríguez, alcalde de Rairiz de Veiga, «a tradición é a tradición e os feitos históricos que se escenifican no combate hai que respetalos no seu contido, por moito que cada ano tentemos mellorar a organización e engadir cousas novas».

El alcalde se mostraba más que satisfecho con esta nueva edición de una cita declarada de interés turístico: «Ata aquí achegáronse hoxe máis de 20.000 persoas, entre a xente que veu á romaría e ó combate. Hai que recoñecer que o tempo axudounos moito pero estamos moi satisfeitos porque todo se desenvolveu como estaba previsto».

La organización del Combate de Mouros e Cristiáns incorporó este año nuevos cañones y se adquirió más vestuario para los derrotados «ademais de mellorar todo o que foi a participación dos efectos de pirotecnia e outros apartados. Niso hai que lembrar que dende a organización se tenta mellorar con cada nova edición para dar resposta á expectación e ó interese que suscita a festa», según señalaba tras el combate el regidor nacionalista. En 2.008 los infieles seguirán saliendo derrotados de A Saínza, pero allí acudirán miles de personas para dar fe de la batalla. Es la tradición.