Leonor le puede dar vida a Sánchez

César Casal González
César Casal CORAZONADAS

OPINIÓN

PHIL NOBLE | Reuters

02 nov 2021 . Actualizado a las 19:06 h.

Como los gallegos somos muy profundos, pero que muy profundos, tenemos una máxima que dice: «Se non queres caldo, toma dúas cuncas». Nada menos que Leonor, la hija del rey Felipe VI, puede hacer que Pedro Sánchez siga todavía más tiempo del que promete una y otra vez al frente del Gobierno de coalición. 

Expertos politólogos definen al presidente como un equilibrista. No se equivocan. Por algo escribió un Manual del resistente. No existe otra cintura como la suya. Fue implacable con Rajoy en la moción de censura. Y más tarde demostró que nada ni nadie, un Iván Redondo, una Carmen Calvo o un Ábalos, más o menos, se interponen entre él y su objetivo.

Ahora, el azar del nacimiento de Leonor, princesa de Asturias, un 31 de octubre del 2005, puede provocar que Sánchez vea extendida su legislatura, la misma que tantos llevan meses (algunos casi desde su primer día) cargándosela al pronosticar, más con el corazón que con la razón, que tendríamos elecciones anticipadas. Algo que quien tiene que firmar el decreto de disolución nunca ha pensado. Así es que no ha hecho ni caso de esos mensajes. Como mucho una sonrisa taimada y siempre las mismas palabras: «Mi intención es agotar la legislatura». Una presidencia que, por la coincidencia a finales de octubre con el solemne juramento de Leonor, al cumplir los 18 años, para acatar la Constitución por su mayoría de edad, puede verse extendida hasta finales del 2023 o incluso primeros del 2024, en vez de ir a urnas en noviembre de ese año, como tocaría.

La Real Academia de Jurisprudencia y Legislación propone bien que se disuelvan las Cámaras con antelación para que las nuevas estén debidamente constituidas el 31 de octubre, bien que se alargue el mandato de las dos Cámaras hasta su extinción.

No hace falta ser muy listo para intuir que Pedro Sánchez, salvo que le interese, preferirá ampliar su mandato. Encima, ese segundo semestre del 2023, España ostenta la presidencia de turno de la Unión Europea, poderoso motivo para que, gracias al juramento de Leonor, el presidente decida convocar para diciembre del 23. Unas semanas extra para solaz de los que tanto llevan jurando que Sánchez es ya un buzo sin oxígeno. Confundir deseos y realidad es humana flaqueza.