Las Instituciones comunitarias han dado un paso histórico aprobando NextGenerationEU. Un Instrumento que podría aportar a España más de 150.000 millones de euros los próximos seis años como estímulo a la recuperación para impulsar su transformación.
Para ello, los estados miembros deben presentar ante la CE un plan que contemple las inversiones y reformas para impulsar su transformación. España tiene una oportunidad histórica de avanzar si es capaz de diseñar, consensuar y ejecutar un verdadero plan de país.
Para conseguirlo es imprescindible conocer las prioridades y los proyectos estratégicos del tejido productivo, estableciendo un diálogo constructivo con los principales sectores económicos del país. Recientemente, hemos conocido una iniciativa para instar al Gobierno a aprobar un PERTE de la industria naval, muy importante para Galicia. El lógico interés de cualquier sector estratégico de verse apoyado institucionalmente para la reconversión verde y digital hace más que comprensible estas iniciativas de sectores y regiones.
En este contexto, ha de darse una coordinación y colaboración institucional adecuada entre el Estado y las cc.aa. El pasado 25 de marzo la Xunta demostró tener un plan sólido de 354 proyectos «maduros y viables» y con un presupuesto de 19.698 millones de euros.
En tercer lugar, es preciso fraguar consensos que garanticen el aval parlamentario a las citadas inversiones y reformas. A ello hay que sumarle la colaboración público-privada. España podrá recibir casi cuatro veces más fondos europeos que en el anterior periodo de programación. Es por ello necesaria la participación privada en esta transformación, sumando su esfuerzo al de la Administración, para lo cual desde EY llevamos meses trabajando con el tejido empresarial gallego.
Finalmente, a la hora de ejecutar el plan, es básico que la urgencia en la gestión no ponga en riesgo el acervo del exitoso aprovechamiento de los fondos estructurales para la cohesión que ha demostrado España. A ello han contribuido instrumentos e instituciones como el Informe preceptivo y vinculante de la Intervención, los informes de la asesoría jurídica o los dictámenes del Consejo de Estado. El éxito del Plan España dependerá de ello. Nos jugamos mucho y no podemos perder esta oportunidad.