Nadie duda que el número real de infectados por el coronavirus SARS-CoV-2 supere de largo los datos oficiales. La sospecha ahora afecta incluso al dato de muertos, aunque no debería ser demasiado difícil estimarlo, sin más que comparar las estadísticas de mortalidad de años anteriores en España con las de estas semanas. También es posible estimar el número real de infectados, tanto presentes como pasados, aunque parezca complicado, gracias al poder de las técnicas estadísticas. Es lo que va a hacer el Gobierno, con un muestreo de más de 60.000 personas, para ver básicamente cuáles de ellas tienen anticuerpos contra el coronavirus y, por lo tanto, saber si han estado o están infectadas. El estudio, una vez completado, será pionero en el mundo, ya que dará un mapa muy real de la difusión del coronavirus.
¿Cómo es posible que estudiando solo 60.000 personas se pueda medir un país de 47 millones? Pues del mismo modo que se miden las audiencias de televisión. En Galicia, por ejemplo, los datos de audiencia se sacan de unos audímetros que solo tienen 850 personas, de las que solo están conectadas 300 en el prime time. Si 60 de ellas ven el mismo programa, la cuota de pantalla de ese programa será del 20 % para los audímetros. La estadística dicta que su cuota real para Galicia estará entre el 15 % y el 25 %, con un 95 % de confianza en esa afirmación. En la medida del coronavirus, las personas muestreadas en Galicia serán unas 3.500, más del cuádruple que para las audiencias. Eso implicará que el resultado será más del doble de preciso que el de las audiencias.