Quiéreteme

Francisco Ríos Álvarez
Francisco Ríos LA MIRADA EN LA LENGUA

OPINIÓN

28 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

«Quiéreteme, date un caprichito, amor», canta Leo Urrutia con voz suave y arrulladora. Sus versos parecen compuestos para una mujer que acaba de despertarse: «Levántate, ya ha salido el sol. / Un día nuevo te espera ya. / Olvídate del antes de ayer. / Solo te tienes que preocupar de ser feliz». La única discrepancia entre lo que se escucha y estos textos es la conversión de quiéreteme y levántate -y más tarde mímateme y cuídateme- en las voces agudas quieretemé y levantaté. Cosas de las cadencias musicales. 

Cuando la dama querida se levante, desayune, cepille los dientes, se duche, se vista y entre en contacto con el mundo exterior se topará con la palabra omnipresente, quiéreteme, ya abra un periódico, encienda el televisor o la radio, o dirija la vista a una valla publicitaria. Desde hace semanas, los grandes almacenes, los grandes grandes, nos invitan a ir a las rebajas con ese lema o con la canción compuesta exprofeso. Las intenciones de los creativos publicitarios son inescrutables, pero, fueran cuales fueran las de los autores de esta campaña, parecen haber conseguido que por lo menos se hable de ella. Del impacto en las ventas sabe su cliente. 

Son muchas las personas que todavía andan dándole vueltas al lema «Quiéreteme», en busca de su significado. También hay quien se pregunta si esa palabra es correcta. Sí lo es. Se trata de un imperativo, quiere, con dos pronombres enclíticos (unidos al verbo), te y me. Si bien la estructura es frecuente (piénsatelo, cómpraselo, quítateme), este caso es inusual, y por ello choca. 

Me es aquí lo que los lingüistas llaman un dativo ético, que es el pronombre dativo átono no reflexivo que señala al individuo que se ve afectado indirectamente por la acción del verbo: No se me irrite; El niño me come muy bien las verduras. Suele preceder al verbo, aunque quiéreteme es la prueba de que no siempre es así. 

El significado de quiéreteme es, ignoramos si intencionada o inadvertidamente, oscuro. El te apunta a ti y el me a mí. Luego, ¿a quién hay que querer? La interpretación más verosímil es ‘quiérete, por mí’ o ‘deseo que te quieras’. La letra de la canción confirma este enfoque: «Quiéreteme, date un caprichito, amor. / Quiéreteme, ponte guapa, por favor. / Quiéreteme, es hora de pensar en ti». La voz tierna de Urrutia está animando a la receptora del mensaje a darse un homenaje con la tarjeta de compra y va repitiendo la estructura de quiéreteme en otros versos: «Cuídateme, ven, acércate. / Mímateme, te quiero besar». 

Adelante, Leo.