Dentro de un orden, aunque nuevo

Jaime Miquel
Jaime Miquel AL DÍA

OPINIÓN

18 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Sondaxe nos ha explicado que en Galicia, como en cualquier rincón de España, sucederá de todo el 24-M. Los partidos preexistentes se mostrarán hegemónicos en unos casos, como en Ferrol, Vigo y Pontevedra, con el PP, el PSdeG-PSOE y el BNG pletóricos en términos de representación. En otros municipios se fragmentará el sistema, lo que planteará todo tipo de soluciones de gobierno, como el acuerdo entre el PP y Ciudadanos para asegurar la alcaldía de A Coruña, pero también las de Madrid o Valencia. El pacto entre el PSdeG-PSOE y las candidaturas de la ruptura resultará insuficiente para resolver la gobernabilidad de Santiago de Compostela y Lugo, lo mismo que otro entre el PP y Ciudadanos, luego hará falta la colaboración de un tercero en estos casos.

Sondaxe avanza situaciones postelectorales diversas, pero subraya que el PP resiste mejor en Galicia que en España, donde difícilmente alcanzará el 30 % de los votos municipales. El 35 % del PP de Feijoo es el mismo que el de Susana Díaz en Andalucía, un porcentaje importante, pero insuficiente para avasallar o para imponer políticas y condiciones; este es el cambio al que hemos asistido, porque ya se ha producido, es estructural, se formalizará en las urnas el 24-M y lo explicamos.

Esperábamos el barómetro de abril del CIS como agua de mayo y llovió a cántaros, porque despejó las pocas incógnitas que quedaban sobre la situación preelectoral continuada en que se está desarrollando este año 2015. El PP (115-125 escaños), ganará las elecciones generales de noviembre, aunque sin sumar la mayoría simple con Ciudadanos (45). Lo mismo que sucede con el PSOE (85-95), que tampoco la alcanza con Podemos (65), luego no hay más pacto entre dos para gobernar España que el que reúna al PP y el PSOE, aunque alejados de los dos tercios de la Cámara. ¿Y un pacto entre tres? El PP no tiene con quién, ni tan siquiera cuenta con el apoyo de Ciudadanos, como veremos en fechas próximas, mientras que el acuerdo entre el PSOE y Podemos (160) no se resuelve con un tercero como CiU (12), porque haría falta un cuarto como ERC (8), y estos no quieren saber nada de quien no les deja votar, además de resultar pintoresco en Bruselas y muy caro en los mercados financieros. Dicho de otra forma, rasguémonos ya las vestiduras, porque en España solo suman el PP con el PSOE, y esta no es una cuestión opinable, sino matemática.

Resulta español o distinto aludir a la ingobernabilidad ante la nueva realidad electoral. El modelo de negocio ahora es pluripartidista, el eje de la acción política perseguirá en breve el lugar de encuentro y el pacto entre el PP y el PSOE será una posibilidad más en los ayuntamientos. Entre tanto, los políticos y los medios hacen todo tipo de cuentas municipales, menos esta suma. Algo así como el acuerdo de gobierno entre CiU y ERC, que se visualiza con normalidad porque les une Cataluña. Convendría irse acostumbrando, porque la situación de Andalucía será una más el 25 de mayo, y nadie llamará a nadie pidiendo auxilio.