Tuerkos versus troskos

Carlos G. Reigosa
Carlos G. Reigosa QUERIDO MUNDO

OPINIÓN

27 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Dicen que la batalla sigue aplazándose en el interior de Podemos porque la paz actual, con sus prometedoras expectativas, beneficia a todos. Pero algunos conspicuos estudiosos del marxismo-leninismo ya han sentenciado que esa batalla se librará antes o después. ¿Y quiénes se enfrentarán en ella? Al parecer, los tuerkos de Iglesias y Monedero (así llamados por su programa televisivo La Tuerka) y los trotskistas llegados de Izquierda Anticapitalista (IA), herederos de la Liga Comunista Revolucionaria, que aportaron su pequeña -pero muy activa- red orgánica, la cual facilitó la rápida expansión territorial de Podemos. ¿Tiene que suceder así inexorablemente? No soy uno de los expertos politólogos capaces de leer en el alma de estas ideologías confrontadas ante determinados intereses. Pero son esos expertos los que aseguran que el conflicto interno sigue latente y que acabará por manifestarse o estallar. Los programas de máximos de quienes provienen de IA no casan con la vocación sincrética de fuerza mayoritaria de los líderes que controlan Podemos y que no quieren volver al rincón oscuro de la Historia, es decir, a una marginalidad ubicada a la izquierda de IU. Los mandos de Podemos saben lo mucho que le deben a los troskos y tratan de integrarlos en el seno de un ambicioso proyecto con mayores respaldos sociales, pero estos no acaban de digerir la conversión de Pablo Iglesias en un Robespierre-Lenín con todos los poderes. Como que para eso no hicieron su larga marcha en solitario quienes militaron en IA. Pablo Iglesias estaría utilizando la estrategia del palo y la zanahoria, convencido de que al final hasta los más radicales llegados de IA querrán tocar poder. Pero no las tiene todas consigo, porque en este grupo (que se convirtió en asociación para integrarse en el partido Podemos) abundan los revolucionarios radicales que defienden una expresión política unitaria, marxista, altermundista y sustentada en los movimientos obreros y sociales. ¿Cómo acabará la historia, en caso de que esto no sea ya solo un rollo del pasado? Si las cosas le van bien a Podemos, creo que habrá armonía. Pero esto ya no lo dicen los expertos, lo digo yo.