23 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.
La escalada de despropósitos de las autoridades venezolanas, encabezadas por su presidente, amenaza las buenas relaciones con España. Se equivoca Maduro si cree que con insultos a Rajoy puede resolver a medio y largo plazo sus problemas internos. Se equivocaría el Gobierno español si se ofendiese más de lo imprescindible. Enfrente tiene solo a un pobre hombre que no necesita que lo empujen. Se caerá solo.