El poder fáctico contra Syriza

Enrique Clemente Navarro
Enrique Clemente LA MIRADA

OPINIÓN

05 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El FMI, la Comisión Europea y el Gobierno alemán han entrado en campaña en Grecia para tratar de evitar el probable triunfo de la izquierdista Syriza. La institución cuyos tres últimos directores gerentes han sido el imputado Rodrigo Rato, el acusado por agresión sexual Dominique Strauss-Kahn y la investigada por corrupción Christine Lagarde decidió suspender las negociaciones sobre las ayudas al país heleno hasta que haya nuevo Gobierno. Recordemos que el FMI admitió hace un año y medio que la troika se pasó con los recortes en el rescate griego, que tuvieron como resultado hundir aún más su economía y disparar el desempleo. Por su parte, el poderoso ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, advirtió de que las reformas, tradúzcase por más recortes, deben seguir adelante y que no aceptará ningún paso atrás de Atenas. Por si el aviso no fuera suficiente el Gobierno de Merkel filtró a Der Spiegel que la salida de Grecia del euro sería inevitable si gana Syriza. El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, que era el primer ministro del gobierno luxemburgués que llegó a acuerdos secretos con 300 multinacionales para que eludieran al fisco, aseguraba que Grecia debía evitar elegir a fuerzas extremistas. Los griegos van a votar con la espada de Damocles sobre sus cabezas de quienes no han dudado en interferir en los asuntos internos de un país al que tratan como una colonia. Esa reacción desmesurada demuestra que temen el contagio griego, es decir que se extienda a otros países, en especial a España, el rechazo al dogma austericida impuesto por Berlín. Pero a muchos griegos amenazarles con el infierno no les va a coartar porque viven en el infierno desde hace años.