Leer, escuchar, debatir

Uxio Labarta
Uxío Labarta CODEX FLORIAE

OPINIÓN

09 may 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Leo de nuevo a Mario Bunge, filósofo de la ciencia: «El mito moderno es que las tecnologías de la información nos van a salvar, que mejorarán la sociedad y salvarán la naturaleza, pero es un mito completo. Con un ordenador no se cultiva el trigo». Tampoco el mejillón, ni la uva, ni el pino. Pienso.

Mario Bunge, recuerdos de los ochenta, afirma: la historia es mucho más científica que la cosmología. La historia es la más científica de las ciencias sociales.

Hace unos días escucho, disfruto, con la clase magistral ¿Galicia periférica? ¿Hay espacio para una política económica?, de Antón Costas Comesaña, gallego activo y trasterrado, en la Fundación Juana de Vega. Acude al debate entre economistas e historiadores acerca de los determinantes de la pobreza y la riqueza de las naciones. Reivindica la industrialización y la industria tan mal tratada -¿por antigua?- en las políticas públicas de los últimos decenios, como evidencia incluso la desaparición del Ministerio de Industria en el año 2000 del Gobierno Aznar. Reivindica las buenas historias, también gallegas, industriales. Reivindica un futuro de alianza entre industria, conocimiento y empleo.

Al hilo de ello encuentro dos interrogantes en torno a la política de especialización inteligente de Galicia (RIS3) recientemente aprobada. Una, siguiendo a Mario Bunge: «Con un ordenador no se cultiva el trigo, aunque conviene que el tractor tenga reguladores electrónicos, pero los grandes avances en la agricultura se han debido a la genética y la ingeniería». ¿Por qué se limita tanto la economía del conocimiento a las tecnologías de la información (TIC) y a las tecnologías facilitadoras esenciales (TFE) (nanotecnología, biotecnología industrial, o materiales avanzados...)? Otra, de la mano de reflexiones de Antón Costas: «La política pública debe de afrontar el problema de la escasa dimensión de las empresas gallegas, muy inferior al tamaño medio de otras economías». ¿Aborda el RIS 3 esta realidad? ¿Qué explica el mayor número de pequeñas empresas en la economía gallega? ¿Cuál es su dificultad para crecer?

Leo también a dos gallegos, uno de nación y otro de nacimiento, César Antonio Molina y Santos Juliá. Sus reflexiones sobre cultura e intelectuales, sobre intelectuales y la realidad. Sobre la realidad y la política. Las razones banales que encierran las decisiones. Los lobbies, y no solo los económicos, que guían las políticas de Gobiernos. La reflexión colectiva sobre el presente y la necesidad de futuro de hombres y mujeres, de países, de naciones. O su ausencia. La ausencia de un esclarecedor e incluso agrio debate, promotor de futuros.

La ausencia de pensamientos abajofirmantes que consienten a poderes y poderosos escribir recetas de menciñeiro de prometidos efectos taumatúrgicos. Como aquellas analizadas y denostadas por José Carlos Díez, economista lúcido, e incluso modestamente autocrítico.

Inevitable cuando paramos en lecturas y debates: Jorge Semprún, La escritura y la vida. Por si Galicia y España existen, y algunos de nosotros con ellas.