Semana Santa 2014

Gonzalo Ocampo
Gonzalo Ocampo EL RETROVISOR

OPINIÓN

23 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

La treintena, larga, de personas muertas en las carreteras españolas durante estos días de la Semana Santa ha de ser una seria decepción para los gestores públicos de la seguridad vial, sobre todo cuando se quiebra una larga trayectoria de bonanza en las estadísticas de la accidentalidad. Quiere uno creer que se muestra una vez más la versatilidad de las conductas humanas en actividades que exigen, siempre, un severo ejercicio de responsabilidad personal y del que tantas veces hacemos dejación. Así lo muestran, sin ir lejos, imágenes captadas por servicios aéreos de vigilancia, de conductores-lectores en un mismo acto. Conductas que conforman esos riesgos que quiebran el equilibrio de la circulación y terminan en desastre.