¿Quién dijo Vietnam?

| CARLOS G. REIGOSA |

OPINIÓN

12 dic 2005 . Actualizado a las 06:00 h.

BUSH lo dijo con claridad la pasada semana: «Retirarnos ahora pondría en peligro a los estadounidenses y daría a los terroristas lo que quieren». ¿De qué hablaba? ¿A quién respondía? No es un secreto. Se dirigía a los que ven en Irak un nuevo Vietnam y una nueva derrota de Estados Unidos. Se dirigía a los que piden que regresen las tropas cuanto antes y a los que condenan sin paliativos su mala gestión del conflicto (la mayoría, según acreditan las encuestas). El presidente de EE.?UU. no habla de Vietnam -¿quién dijo Vietnam?-, pero sus mensajes son inequívocos. Hemos pasado del «nada que ver con Vietnam» de que presumían los halcones Rumsfeld, Wolfowitz, Rice, Kagan, etcétera, a no pronunciar la palabra para evitar el contagio. Porque la realidad de Vietnam fue -como bien observó Richard Nixon- que la derrota no se produjo en el campo de batalla, sino en la opinión pública americana. Fue en la sociedad estadounidense, mayoritariamente en contra, donde se perdió aquella guerra. ¿Está ocurriendo ahora lo mismo? Los que hablábamos del riesgo de vietnamización aún antes de que empezase la guerra de Irak éramos acusados de desconocer la realidad, de ignorar que Irak no tenía nada que ver con Vietnam, y de ser los heraldos de una deriva que era imposible. Y era imposible, entre otras cosas, porque la guerra iba a durar sólo unos días, y después empezaría la pacífica y asombrosa reconstrucción de un país que nadaba en petróleo. Un cuento de hadas, vamos. ¿Quién decía Vietnam? ¿Quién se atrevía? En las hemerotecas están las páginas de los más brillantes diarios anglosajones dando por supuesto que esa repetición era imposible. Lo aseguraba el mejor periodismo del mundo, dicho sea de paso. ¿Se equivocaba? Todas las guerras que libran los imperios son, en principio, guerras ganadas. Lo son antes de producirse. Lo era Vietnam. Y lo era también Irak. ¿Qué está ocurriendo entonces? Que EE.?UU. siente ahora la misma náusea que sintió cuando lo de Vietnam. El próximo jueves se forma el Gobierno iraquí. Y los americanos (Bush incluido) rezan para que sus tropas puedan salir cuanto antes de un lugar al que nunca debieron ir. En este punto estamos.