Etiqueta Negra se convirtió en uno de los mayores organizadores de eventos de España desde su sede en el concello lucense: «Somos de pueblo, eso que quede claro»
03 ene 2022 . Actualizado a las 11:39 h.Unos amigos de Sarria unidos por la pasión por el espectáculo son ahora los que están detrás de la producción de los shows de comedia de Galicia y el norte de España. Su experiencia y, sobre todo, su buen ojo los llevó a participar en el espectáculo de comedia más grande del país: Estirando el Chicle. Y como ellos destacan, con el añadido de que lo hacen dos mujeres cómicas, Carolina Iglesias y Victoria Martín. «Que las entradas para su show se terminaran en unas horas para el Wizink Center, que es el espacio de referencia nacional, es la mejor noticia que nos podían haber dado», cuenta Iago Regueiro, uno de los socios de la productora Etiqueta Negra.
En el 2001 se celebró el primer Club de la Comedia de España. Y solo dos años después, se fundaba en Sarria Etiqueta Negra. «Empezamos muy pronto y eso evidentemente nos ayudó a posicionarnos», explica Regueiro, en nombre también de sus compañeros y socios de la productora. Su trayectoria empezó ligada directamente a un nombre: Luis Piedrahita. Este cómico coruñés regentaba los locales donde los sarrianos organizaban conciertos y monólogos, así que juntos «echaron a rodar».
Empezaron produciendo la gira de diferentes artistas. A Piedrahita se le unieron nombres como Berto Romero, David Amor o Leo Harlem. Es decir, la especialidad son los espectáculos de humor. En España, como cuenta Regueiro, hay tan solo tres productoras que controlan el «monopolio» de los shows. «Nos ayuda que cada uno está en una punta, nosotros en Sarria, otros en Cataluña y los terceros en el sur», explica el sarriano. Así que poco a poco, Etiqueta Negra se hizo con las distribuciones en exclusiva en el norte de España.
Una sede inamovible
Hasta hace tres años, el equipo sarriano tan solo se centraba en la producción de espectáculos, pero entonces y tras casi 20 años de trabajo a las espaldas, decidieron ampliar sus líneas de actuación. Abarcan el booking, es decir, la contratación de artistas para clientes públicos o privados que se lo pide, el management, que es la representación de artistas, y la propia producción. En total, están detrás de unos 300 shows anuales y todos ellos se organizan desde Sarria. «Nosotros somos de pueblo, eso que quede claro», recalca Regueiro. El teletrabajo está totalmente implementado entre los empleados de la productora, que ya ascienden a siete, por lo que cada uno trabaja desde donde desea. «Los tres que somos de Sarria vivimos aquí y trabajamos desde aquí, aunque la mitad de la semana la tenemos que pasar fuera por los eventos», cuenta.
Un festival propio
La productora también participa en gran parte de la vida cultural y de ocio de la localidad que los vio nacer. En verano, organizan el ciclo Sarria Sorrí, en el que reúnen a grandes cómicos en la villa sarriana. «Siempre hacemos algo porque queremos darle al pueblo algo de vida. Aunque no es nuestro principal objetivo, queremos poder firmar algo en Sarria. Esperamos poder hacerlo no más grande pero sí más cuidado», relata Regueiro.
El evento más importante que sacan adelante los sarrianos es el Encuentro Mundial de Humorismo (EMHU), que se celebra en A Coruña: «Es el festival de comedia más importante de España». Pero el coronavirus solo les permitió realizar dos ediciones, para los próximos años confían en que será «un gran número» donde pasarán «cosas muy bonitas» con la exclusividad de casi todos los artistas nacionales.
Un récord histórico
Entre todos los éxitos de la productora de Sarria, destaca el «completo» conseguido con el show en directo de Estirando el Chicle, que agotó las entradas en apenas unas horas para el Wizink Center de Madrid. La vinculación de los sarrianos con estas humoristas surgió a raíz de la relación con Carolina Iglesias: «Nos gustaba mucho como trabajaba y estábamos muy pendientes de lo que hacía». Primero quisieron producirle un show de comedia en directo, pero llegó la pandemia, las dos humoristas lanzaron el pódcast Estirando el Chicle y fue la oportunidad para producirles un espectáculo en teatro. Desde detrás del escenario, los sarrianos están igual o más de satisfechos porque «es un hecho histórico que le pasa a gente que además es buena».