Diego As crea en un antiguo cine de Badajoz un inmenso mural a la belleza

Lorena García Calvo
Lorena García Calvo LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

El grafitero lucense dio forma a una gran obra para la nueva tienda de Arenal en Extremadura y ahora está en Guinea Ecuatorial con su primer proyecto en África

01 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuenta Diego As que, tras dos intensísimos años de trabajo en los que apenas ha parado, este verano se tomará unas semanas de descanso para recargar pilas y creatividad. Pero antes de ese respiro, su agenda ha sido un hervidero. Estos días se encuentra en Guinea Ecuatorial creando sus primeros grafitis en continente africano, y hace unas semanas se desplazó a Badajoz para poner su firma al que probablemente sea el mural más grande a cubierto. 

Fue la compañía lucense Arenal la que hizo a Diego As el encargo en Extremadura. La firma de cosmética y perfumería abre estos días en Badajoz una nueva tienda y quiso convertirla en un lugar todavía más especial de lo que era. El local, que en su día ocupaba Zara, había sido un antiguo teatro y cine conocido como Menacho, por el nombre de la calle. 

En ese inmenso local con varias alturas había una pared de grandes dimensiones que bien podría funcionar como espacio en el que proyectar películas, y es al que Diego As ha dado su sello personal. «Ten uns 14 metros de alto por 7 de ancho, é o máis grande que pintei en interiores, e foi un reto. Primeiro, porque tiña unha claraboia encima que metía luz e sacaba reflexos do esprai, por iso tiven que cambialo por pintura plástica; e despois, porque para observalo con perspectiva, non había moita distancia, pero se se mira dende as escaleiras que suben, queda moi ben», describe. 

La propuesta de Arenal era que crease un gran mural que representara la belleza de la mujer, la cosmética y la perfumería, y lo que As propuso fue un torrente de colores que nacen del blanco y negro y que sugieren, precisamente, belleza. «Fíxome especial ilusión que me chamaran para este traballo por ser unha empresa de Lugo», reconoce el artista, cuyo Julio César de la Ronda da Muralla fue elegido en su día como el mejor mural del mundo. 

Salto a África

El éxito arrollador de ese Julio César que mira de rejo a la Muralla de Lugo dio a Diego As una notoriedad que le ha llevado a saltar al continente africano. Hasta mediados de julio trabajará en la ciudad de Bota, en Guinea Ecuatorial, contratado por la Fundación Hermanos Martínez. El artista lucense se encargará durante estos día de impartir algunos talleres sobre muralismo a niños y también de crear dos grandes grafitis en el club Ukomba, un complejo deportivo en el que la fundación pone especial mimo. 

Diego As, junto a su premiado mural de Julio César, en Lugo
Diego As, junto a su premiado mural de Julio César, en Lugo ALBERTO LÓPEZ

«Chamáronme hai aproximadamente ano e medio e pareceume unha oportunidade. Ata agora, no extranxeiro só fixera traballos en Portugal e en Londres, é a primeira vez que traballo en África. Creo que me chamaron despois de ver algúns dos meus traballos por Internet», cuenta el artista. 

En la pista de baloncesto del complejo deportivo creará un mural con temática de baloncesto cuyos protagonistas son dos jóvenes de Bata que consiguieron becas de la fundación para perseguir sus sueños en Lanzarote. El otro, en interior, probablemente mostrará la figura de un niño guineano con detalles deportivos. 

Cuando As finalice su trabajo en Guinea Ecuatorial, se cogerá unas merecidas vacaciones. Desde que su Julio César recorrió virtualmente el mundo, no ha dejado de trabajar, así que ahora, tras dos años de no parar, se tomará un merecido descanso.