El Concello de Lugo asegura que la playa fluvial tiene todos los permisos y se abrirá este verano

La playa fluvial en el río Miño es una demanda histórica que varios gobiernos locales intentaron sacar adelante, pero que por el momento no se ha completado. Problemas de seguridad para los usuarios y la localización de especies en peligro de extinción, como traslada un informe realizado por la Xunta, parecen frenar otro verano más la instalación de la zona de baño en el amplio espacio elegido por el Concello, entre el parque infantil y la pasarela del fondo de Alfonso X.

Antes de realizar la obra se debían cumplir una serie de condiciones en la zona, como así indicaba el informe ambiental solicitado por la la Confederación Hidrográfica do Miño-Sil y realizado en enero de 2019 por la Consellería do Medio Ambiente, Territorio e Vivenda. Respetar la fauna y la flora y proceder a su traslado en caso de encontrar especies amenazadas o evaluar el período de instalación de las piscinas, puesto que podrían producirse corrientes y caudales elevados, se encontraban entre los condicionantes marcados.

Permiso sin cumplir las condiciones

La Hidrográfica autorizó la obra. Como indican desde la Xunta, aunque el Concello contaba con los permisos y con la documentación requerida, estos detalles no fueron respetados, a pesar de que el 4 de noviembre del 2020 la Confederación Hidrográfica autorizó al Concello de Lugo a instalar en el cauce del río una zona de baño compuesta por cuatro piscinas flotantes, que podrían colocarse en el mismo lugar todos los veranos desde el 15 de junio al 15 de septiembre.

Desde entonces, según explica el servicio de prensa de Medio Ambiente, el gobierno local no se puso en contacto con el Servizo de Patrimonio Natural de la Provincia de Lugo. Por ello, según señalan, al detectar que la administración depositó comenzó el proyecto sin cumplir las condiciones y sin avisar de la instalación, como se solicitaba en el informe, los agentes medioambientales decidieron realizar una inspección en la zona.

Impacto en la flora del río

Localización de dos colonias de especies protegidas. Tras las inmersiones de los técnicos, localizaron la presencia de dos grandes colonias de mejillón de río, Unio delphinus y Potomida littorali, en peligro de extinción, reconocidas como vulnerables en el Catálogo Galego de especies ameazadas. El hallazgo de estos dos bivalvos dificulta la instalación de las piscinas flotantes, ya que no se podrían colocar los muertos de hormigón con los que se sujetarían los pantalanes. Al tratarse de especies protegidas, los permisos y su retirada serían procedimientos que se alargarían en el tiempo.

Problemas de seguridad para los bañistas

Escasa profundidad. A su vez, de acuerdo con el informe, existen problemas de calado y corrientes continuas que afectan directamente a la seguridad de los futuros usuarios. Se detectaron zonas muy poco profundas, con unos 80 centímetros de agua, que suponen un riesgo en caso de que los bañistas se zambullan de cabeza. Este impacto sería aún más peligroso, puesto que en algunas de las zonas que presentan escasa profundidad, el suelo no es de piedra de río y arena, sino de roca.

Corrientes peligrosas. Las corrientes continuas, como trasladan los técnicos de la Xunta, también indican que el espacio elegido por el Concello para instalar la zona de baño no sería el más indicado. En ese tramo, el río se estrecha, por lo que si se producen fuertes lluvias, subiría el caudal de manera repentina y las corrientes se multiplicarían. Aunque sería algo relativamente improbable, en caso de producirse, el agua podría arrastrar tanto a los bañistas como a los propios pantalanes.

Obras paralizadas

El Concello mantiene la apertura de la playa fluvial para este verano. Estas circunstancias identificadas por la Consellería indican que lo más recomendable sería trasladar la zona de baño a otro punto del río. Sin embargo, la actuación, que por el momento se encuentra parada, tras colocar el primer pantalán en el río la semana pasada, depende del Concello de Lugo y de la Confederación Hidrográfica do Miño-Sil.

la versión del ayuntamiento de Lugo

Aseguran que no disponen de ninguna notificación oficial. Desde la Administración local afirman que cuentan con todos los permisos necesarios y que no disponen de ninguna notificación oficial que «nos impida seguir avanzando na creación desta dotación, tremendamente demandada pola cidadanía», trasladó este martes la alcaldesa Lara Méndez. Por ello, están haciendo «todo o posible para que a plataforma de baño pública abra este mesmo verán». 

A su vez, en cuanto a las problemáticas señaladas en el informe de la Consellería, la regidora asegura que los técnicos municipales están trabajando con los de la Xunta en alternativas «que poden pasar ben polo desprazamento augas arriba da propia estrutura, ben polo traslado da pequena colonia de mexillóns atopada a outro emprazamento, tal e como a Xunta lle permitiu facer á Confederación Hidrográfica para poder executar as obras do caneiro de Acea Olga».

Unas actuaciones que complementan al acondicionamiento de la superficie, la colocación del mobiliario urbano, la implantación del servicio de socorrismo y la modernización de los parques infantiles de la zona, a través de los que pretenden la apertura de la plataforma para esta época.

La actuación de la Confederación

Evaluarán la propuesta del Concello. Desde la Confederación Hidrográfica Miño-Sil aseguran que la autorización por el uso de la cuenca del año 2020 no exime de los requerimientos de otras administraciones para un proyecto cuyo promotor es el gobierno local. Sobre las corrientes en la zona de baño, señaladas en el informe de la Xunta, mantienen que el Concello aportó en su solicitud los correspondientes estudios requeridos. Tras los inconvenientes en cuanto a seguridad y la detección de las colonias de especies protegidas, evaluarán la propuesta recibida por la administración local para aplicar el procedimiento de acuerdo a la normativa.

El PP denuncia la mala gestión y teme que el bigobierno eluda responsabilidades

Las reacciones tras los nuevos contratiempos en la instalación de la playa fluvial no se han hecho esperar. Este martes el Partido Popular trasladó su temor a que el bigobierno intente eludir responsabilidades en la gestión. «No han tenido previsión suficiente con el material, que hasta finales de julio no llegará y, en segundo lugar, el proyecto no cumple todos los requisitos necesarios para garantizar la seguridad de los bañistas», destacó el viceportavoz, Antonio Ameijide.

A su vez lamentan que «la incompetencia de PSOE y BNG pueda dejar a los lucenses otro verano más sin esta zona de baño público en el Miño que prometieron en el año 2010». Una dotación, señalan, con la que sí cuentan los municipios limítrofes como O Corgo, Outeiro de Rei, Begonte o Portomarín, por lo que «no les pedimos nada que no tengan en cualquier otro sitio».

El tipo de proyecto ejecutado también es motivo de examen para los populares. «De entrada lo que anunciaron a bombo y platillo fue un parche, no es una playa fluvial sino que se trata de unas piscinas flotantes», añade Ameijide. Por ello, para el portavoz este «va a ser el último verano de Lara Méndez como alcaldesa y si como todo apunta nos podríamos quedar sin playa fluvial lo que se certificará es un nuevo fracaso en su gestión al frente del ayuntamiento de Lugo».

La playa fluvial de Lugo vuelve a retrasarse por falta de permisos

En el lugar elegido hay corrientes, rocas a escasa profundidad y mejillones en peligro de extinción. Todo ello hace dudar de que se pueda ubicar en ese lugar

L. B. / S. V.

Todo parece indicar que los lucenses volverán a pasar otro verano sin playa fluvial. En el lugar elegido por el Concello, cerca de la intersección de la N-VI con Alfonso X, han aparecido una serie de problemas que recomiendan su traslado a otro lugar. Y de hecho, las obras de colocación de un primer pantalán que se iniciaron la semana pasada, ya están paralizadas.

Falta de profundidad

Riesgo de lesiones por lanzamiento de bañistas. Los técnicos de la Xunta, según explican desde el gabinete de prensa de la Consellería de Medio Ambiente, detectaron que hay zonas muy poco profundas, de solo 80 centímetros de agua, lo que supone un grave riesgo cuando los bañistas se zambullen de cabeza desde los pantalanes: chocar contra el fondo puede suponer lesiones en la cabeza o medulares. Además, en alguno de esos lugares de poca profundidad, el suelo no es de piedra de río y arena, sino de roca madre, lo que agrava aún más el impacto.

Corriente en el agua

Riesgo de que se lleve al bañista o los pantalanes en caso de tormenta. Otro de los problemas que detectaron los informes de los técnicos de la Xunta, según explica el servicio de prensa de Medio Ambiente, es que hay una corriente importante, de unos 0,2 metros por segundo. En caso de producirse fuertes lluvias por tormentas aguas arriba de la zona de baño, esta corriente puede multiplicarse y suponer una probabilidad de arrastrar tanto de los bañistas como de los propios pantalanes. Hay que recordar que, aunque estas cosas son improbables, una fuerte tormenta en Viveiro en pleno mes de agosto hace algunos años acabó llevando las tiendas de campaña de quienes acampaban junto al río en la romería de O Naseiro. En aquel caso, por fortuna no hubo que lamentar víctimas humanas, aunque los daños por desbordamiento del río en plena canícula de agosto fueron cuantiosos.

Especies en extinción

La presencia de una colonia de miles de mejillones acaba de complicar la situación. Por último, el departamento de prensa de Medio Ambiente también informa de que los técnicos hallaron en la zona una colonia de miles de mejillones de río. Una especie en peligro de extinción que impediría, por ejemplo, colocar en el fondo del río los muertos de hormigón con que sujetar los pantalanes. Al tratarse de una colonia tan importante, los permisos y tareas de traslado llevarían bastante tiempo.

Hidrográfica del miño-Sil

Dio permiso que no incluye estos detalles. El Concello de Lugo reconoció ayer que recibió autorización de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, pero que todos estos detalles no están recogidos en el permiso. Por ello, todo apunta a que el gobierno local lucense necesitará algún tiempo para revisar estos detalles y subsanarlos, o buscar otra zona 

La versión del concello: todo esto no impedirá abrir este verano

Desde el Concello de Lugo reconocen que hay un retraso en la instalación de las estructuras flotantes, por una parte, debido a los problemas de entrega de material de las empresas, y por otra, por la aparición de una colonia de mejillones de río que ha obligado a los técnicos de Concello y Xunta a buscar una solución.

Dice el concello que aunque la zona de baño cuenta con los permisos de la Consellería de Medio Ambiente y de la Confederación Hidrográfica, en el momento de la instalación de las estructuras, se necesita un informe favorable de la Dirección Xeral de Conservación da Natureza que autorice que en el momento de actuar no existen problemas en el río para la manipulación de estructuras.

Pero, al parecer, tanto los técnicos de la Xunta como del Concello cuando fueron a realizar ese informe previo se encontraron con una abundante colonia de mejillones de río que son especie protegida. La presencia de estos mejillones en esta zona del Miño se debe a los mismos motivos por los que en la primavera aflora vegetación en el cauce: la alta calidad de las aguas. Desde el Concello señalan que están trabajando con la Xunta para adoptar una solución y evitar más retrasos. Ambas Administraciones barajan, o bien trasladar a otra zona del río las colonias de mejillones, algo que al parecer es posible, dice el concello, o desplazar unos metros la zona prevista de baño. En todo caso, desde el gobierno local señalan que este retraso no va a impedir que se instalen las piscinas flotantes este verano, y recuerdan que el área fluvial cuenta con los permisos de las Administraciones competentes. Además, confían en que la reciente noticia de que la Confederación va a reparar el caneiro de la zona de O Muíño ayudará a aumentar el caudal del río en la zona.

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