Le dijo a la Guardia Civil durante su declaración que le había disparado porque se metía en la carretera
07 dic 2019 . Actualizado a las 09:49 h.El hombre que está siendo investigado por maltratar y tirotear a la perra Alma en Chantada alega que le disparó porque el animal rondaba por una carretera cercana y era un peligro para la circulación. Al parecer, el sospechoso dio esta explicación a los agentes de la Guardia Civil que acudieron a su casa a tomarle declaración después de que unos testigos denunciasen lo que estaba pasando.
Una pareja, la voz de alarma
El suceso ocurrió el pasado día 3 en las cercanías de la aldea chantadina de Soilán y si trascendió públicamente es porque una pareja que circulaba en ese momento con su coche por allí vi la escena, se paró y la grabó en vídeo con un teléfono móvil. Los dos testigos contaron a la Guardia Civil que mientras iban en su coche por la carretera N-540 cuando a la altura de Soilán se encontraron con que un perro cruzaba la carretera delante de ellos e inmediatamente oyeron un disparo. Al mirar hacía el lugar del que venía el ruido vieron al ahora denunciado con una escopeta en la mano. Después pararon el coche, se encararon con el hombre y avisaron a la Guardia Civil.
Acababa de parir
Al parecer, el denunciado admitió a los agentes que acudieron a tomarle declaración que la perra no era suya, pero que acababa de parir a seis crías en un alpendre cercano a su casa. Y añadió que le disparó porque el animal se metía en la carretera y podía provocar un accidente de tráfico. La investigación judicial abierta tendrá que determinar si después de tirotearla arrastró a la perra doscientos metros con un pastor y un hierro de un pastor eléctrico. Es lo que recoge al parecer el atestado policial, en el que los agentes explican que el denunciado había reconocido que disparó contra la perra a través de la carretera y hacen constar que una vez herida fue a por ella, la ató y la arrastró por el suelo con la cuerda y la pieza del pastor eléctrico unos doscientos metros.
Arma confiscada
La Guardia Civil confiscó al autor del disparo el arma que había utilizado en la agresión, una escopeta de marca Benelli. También le ha sido reiterada de forma cautelar la licencia de armas de caza de la que es titular. Al margen de que pueda figurar como imputado en un delito de maltrato animal, lo que le puede suponer una condena de hasta dieciocho meses de cárcel, el mero hecho de disparar una escopeta de caza junto a la carretera N-540 ya supone una infracción administrativa por la que las autoridades puede dejar en suspenso una licencia de armas y confiscarle al responsables sus armas. La ley de caza vigente en Galicia prohíbe no solo disparar, sino incluso llevar una arma de estas características montada en las cercanías de una carretera.
Los cachorros de Alma se recuperan en Vilalba
Los seis cachorros de Alma, la perra que murió tras ser maltratada y recibir un disparo de un cazador de Chantada, se recuperan con Tamara en su casa de Vilalba. «Soy casa de acogida y axuliar veterinaria. Además, tengo lámparas de calor», explica esta mujer. Y es que los seis animales no han podido caer en mejores manos. Por la casa de Tamara pasaron más de 200 perros y gatos en los últimos nueve años. «Crie muchas camadas a biberón», añade esta mujer, que decidió contar y aclarar lo sucedido.
Los seis cachorros entraron en un centro autorizado por la Xunta y fue Tamara la que se hizo cargo de ellos como casa de acogida y también como voluntaria. Este es el procedimiento habitual en estos casos. Los animales estuvieron perfectamente cuidados en todo momento. Aunque hubo distintos movimientos para trasladar a los perros a otros lugares, este tipo de procedimientos están reglados por la administración, que obliga al cumplimiento de la ley.
Cientos de personas en la concentración de Lugo leyeron un manifiesto a favor del endurecimiento de las penas por maltrato
Varios cientos de personas salieron ayer a las calles de Lugo para exigir el endurecimiento de las penas por maltrato animal tras casos como el de Alma. La concentración empezó frente al Concello, en la Praza Maior, a las ocho de la tarde y recorrió también la calle de la Reina , la Ronda y volivó a la plaza. En la protesta, cientos de personas expresaron su repulsa ante casos como el de la perra de Chantada, que falleció después del brutal maltrato que le profirió un cazador, que llegó a dispararle y arrastrarla por el suelo.