El PSOE ganó en 99 de las 123 mesas de Lugo

Suso Varela Pérez
suso varela LUGO / LA VOZ

LUGO

Una extrapolación le daría a Lara Méndez 10 ediles y la derecha, con Vox, se quedaría a uno de la mayoría

30 abr 2019 . Actualizado a las 08:45 h.

Con los resultados de las elecciones del pasado domingo Lara Méndez podría volver a ser investida alcaldesa de Lugo. La victoria por 8,42 % de votos de diferencia con el PP augura unos buenos resultados para su candidatura en las elecciones del 26 de mayo pero ni mucho menos se puede confiar el PSOE ni la derecha caer en el pesimismo. Los escenarios son totalmente distintos, entran nuevas variables y otras candidaturas y el partido hegemónico en la derecha querrá movilizar al electorado perdido.

la extrapolación

El PSOE, 10 ediles. Con los resultados del domingo, el PSOE obtendría 10 ediles (tiene 8 en la actualidad); el PP 7 (tiene ahora 9); Unidas-Podemos tendría 3; Ciudadanos, 3 (tiene 2) y Vox conseguiría 2 ediles. Con estos datos, Lara Méndez necesitaría o bien los tres ediles de Unidas Podemos o los de tres de Ciudadanos para ser alcaldesa. Pero un ejemplo de que estamos hablando de un escenario muy improbable es que el BNG, al no llegar al 5 % mínimo que se exige para entrar en una corporación local, no tendría representación. Y esta situación se da por sentado que será imposible. El BNG de Rubén Arroxo tiene ahora dos concejales y según las encuestas y la valoración del candidato, hay muchas opciones de que aumente su representación. Además, es importante recordar que Unidas Podemos se presenta el 26 de mayo dividida, por un lado ACE, con Portomeñe, y por otro Podemos, con Josito Pérez. Y como último factor, En Marea, que obtuvo un resultado pésimo este domingo, tiene opciones de entrar con Lugonovo, de Xosé Chorén. Ahora tiene tres concejales.

el préstamo

El voto útil de la izquierda. En el PP se habla mucho del voto útil de la derecha. Los resultados de Lugo ciudad demuestran que sí hubo voto útil, pero en el ámbito de la izquierda. La llamada masiva a las urnas que hizo el Gobierno de Sánchez y que el reparto de escaños en la provincia hace complicado el acceso a ellos de formaciones pequeñas impulsó un voto hacia el PSOE. Solo así se entiende buena parte de los 7.107 votos de más de estas elecciones con respecto a junio del 2016. Sumando los votos de Unidas-Podemos y en En Marea, obtuvieron 3.664 votos menos que hace tres años cuando fueron en una sola marca. Una parte se pudo ir al incremento del BNG, que subió 1.286 votantes, pero el resto engordó las cifras del PSOE. Hay que recordar que en los comicios del domingo votaron cerca de 4.300 lucenses más que hace tres años.

subidas y bajadas

El voto dividido de la derecha. El PP, a pesar de incrementarse en más de 5,5 % la participación, se dejó este domingo en el camino 6.851 votos. La suma de electores de Vox, que en el 2016 no se presentó, y el incremento de Ciudadanos en la ciudad, arroja 6.138 votos. ¿Fueron del PP en el 2016? Un gran porcentaje sí. Ayer mismo los dirigentes populares lucenses se lamentaban de que los votos de Ciudadanos y Vox en la provincia al final «non serviron para nada», apelando al voto útil que defendieron durante la campaña. Pero ese argumento no tendrá sentido en las municipales de mayo, donde Ciudadanos aspira a aumentar sus actuales dos concejales y Vox -que el domingo sin candidato lucense fue capaz de ser la quinta formación- tiene posibilidades de obtener representación en el Concello, siempre y cuando supere el 5 % de los votos.

El psoe solo pierde en el centro y en el rural

En los barrios de la periferia arrasó el PSOE. De las 123 mesas electorales del municipio de Lugo, el PSOE fue la fuerza más votada en 99 y el PP en 24. Los populares mantuvieron la primera posición en las mesas de Facenda, Edificio Seminario, Uxío Novoneyra y el IES Xoán Montes. Además, en las mesas de las parroquias venció claramente el PP. La fuerza de los socialistas se pudo comprobar en los barrios de la ciudad, con alguna mesa donde los votos del PSOE fueron el doble que los del PP, como por ejemplo ocurrió en una del colegio de Casás, con 278 votos frente a 136; o en el centro Díaz Castro, en O Castiñeiro, con 222 frente a 111. Los socialistas ganaron en las mesas de los barrios del sur (Acea de Olga, San Fiz, Fontiñas) y el norte de la ciudad (A Milagrosa, A Piringalla). El voto de la derecha estuvo en el centro, ya que Ciudadanos ganó en estas mesas al resto de partidos. Un ejemplo de voto prestado se pudo comprobar en feudos habituales del BNG, como Fontiñas, donde no obtuvo buenos resultados. Por su parte Vox, que tuvo unos 1.300 votos más que el Bloque, tuvo su voto repartido por todas las mesas del municipio, siendo la tercera fuerza en la de Obras Públicas de O Ceao.

los restos

Votos nulos y blancos. Apenas hubo variaciones con las elecciones del 2016, lo cual implica que al aumentar la participación, el voto fue encauzado hacia los partidos. Pacma y Recortes Cero perdieron votos y Compromiso se quedó en solo 80.