«En el Ensino volví a sonreír»

Marta de Dios Crespo
MARTA DE DIOS LUGO / LA VOZ

LUGO

ALBERTO LÓPEZ

La ala-pívot deja el club tras convertirse en su puntal las últimas campañas

19 jul 2015 . Actualizado a las 09:53 h.

Mireia Navarrete (Sabadell, 1980) llegó de Canarias a Lugo en el año 2010. En cinco años se convirtió para el Ensino en uno de los puntales indiscutibles del primer equipo, tanto dentro como fuera de la cancha. La próxima temporada no vestirá la camiseta rojilla, pero eso no le hace pensar en colgar las botas.

-¿Deja el Ensino?

-Sí, me comentaron hace unas semanas que quieren apostar por las niñas de la cantera. En el club me dijeron que están pensando en un nuevo proyecto en el que yo no tengo cabida.

-¿Y tiene alguna oferta?

-A día de hoy no tengo equipo, aunque no he colgado las botas. Me estoy tomando el verano como si nada hubiera cambiado. Me mantengo en forma y salgo a correr. Estoy en un momento en el que me tiene que atraer el proyecto deportivo, también lo económico, pero que me permita compaginarlo con mi trabajo.

-¿Cómo lleva dejar el Ensino tras tanto tiempo?

-Me está costando. Estos días me preguntan los amigos y no sé muy bien que contestarles, que me siento «raruna». Asimilar que la etapa en el Ensino finaliza es difícil. Ahora está claro que ha acabado y que empieza otra.

-¿Cómo han sido estos cinco años en el club?

-Muy buenos. Estoy muy contenta por todo lo que he vivido aquí. Cuando llegué a Lugo dejé la Liga Femenina para poder compaginar el deporte con mi trabajo. Estos años han sido para mí un auténtico regalo y no tengo más que palabras de agradecimiento infinito para todos los que me dieron la oportunidad. En el Ensino volví a sonreír y a disfrutar con el baloncesto. Cuesta asimilarlo, precisamente, porque han sido unos años muy buenos.

-¿Se va con la espina del ascenso? Y este año estuvo cerca...

-Sí. Lo dejo con esa espinita de no dejar al Ensino en Liga Femenina. El ascenso era un objetivo para mí esta temporada. Mi objetivo era ascender y si lo conseguía, retirarme este año. Yo llegué aquí con ganas de dejar al equipo en lo más alto, pero no pudo ser.

-¿Le gustaría mandar algún mensaje ahora que se va?

-Sí, a la afición. Me gustaría darles las gracias por todo lo que me han apoyado estos años, tanto si me han salido las cosas como si no. Si sigo ligada al baloncesto será para dar lo mejor de mí, porque sigo teniendo dentro el gen competitivo y no me vale cualquier cosa.