«Quiero llenar Lugo de Aloumiña»

Marta de Dios Crespo
Marta de Dios LUGO / LA VOZ

LUGO

Tras quedarse en paro, este administrativo decidió vivir de su afición, hacer cerveza artesana

08 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Alberto Curiel Sánchez es un emprendedor lucense. Después de quedarse en paro, decidió montar su propia empresa. De trabajar como administrativo se convirtió en un maestro cervecero. Todavía está dando los primeros pasos para situar su cerveza como referente, pero es ambicioso y trabajador y está convencido de que tiene un buen producto. Trabaja en un taller artesanal ubicado en el vivero de empresas propiedad del Concello y está dentro del programa Dinamíz@te de la Diputación de Lugo y de la Escuela de Organización Industrial.

 

-¿Cómo surge la idea de poner en marcha este proyecto?

-Un poco por la crisis. Yo trabajaba en otro sector y hacía cerveza casera como hobby, hacía diferentes estilos de cerveza; y en mi círculo familiares y amigos me decían que estaba muy rica, más que la cerveza industrial. En el 2013 me quedé en paro y decidí hacer de mi afición un negocio y llevar este sueño a cabo.

 

-¿En qué consiste este nuevo trabajo exactamente?

-Hago cerveza artesana. Desde que empecé, intento asentar la empresa en tres pilares. Hacer cerveza artesana, respetando sus tiempos, con una carbonatación natural, sin filtrar, sin pasteurizar y guardando todas sus cualidades organolépticas. El segundo pilar, que sea 100% natural; solo utilizo para elaborarla agua, cebada, levadura y lúpulo. No aplico aditivos ni conservantes. El último pilar es que es autóctona, hecha por un vecino de Lugo y que tiene como destinatario final a la gente de Lugo.

 

-¿Que sea una cerveza autóctona la hace mejor?

-Te cuento una cosa que es fundamental para que aquí hagamos cervezas de calidad. El 90% de la cerveza es el agua y en Galicia, en Lugo concretamente, tenemos aguas de calidad. Es un factor muy importante con el que contamos los cerveceros gallegos. Cuando profesionalicé la empresa y pasó de ser un hobby a algo serio, aprendí mucho en Cataluña. Allí llevan más años en el sector de la cerveza artesana, fui a varias fábricas a aprender y a seguir formándome. En Cataluña tienen conocimientos, pero tienen el problema del agua: allí necesita un proceso de ósmosis, mineralización... Aquí, en cambio, contamos con agua de calidad, algo que juega a nuestro favor.

-¿Y fue una inversión importante o para arrancar no hace falta tanto?

-Sí hace falta. Hizo falta mucha inversión. De hecho todos los ahorros que tenía los metí en la empresa; y eso que yo empecé con una capacidad de producción pequeña en relación a otras microcervecerías artesanas que tienen una capacidad de producción mayor. Como te decía, ahora estamos en una fase de ampliación en la que queremos ampliar la producción y con ello las ventas. Es un trabajo que implica muchas horas para ganar poco, sobre todo ahora en los comienzos. Al final trabajas mucho más de lo que trabajabas por cuenta ajena y ganas menos. Espero que sea solo en los comienzos [ríe]. Aunque la cerveza está rotando y se está moviendo.

-¿Cuántas horas le echa al día?

-Diez horas no me las quita nadie. Pero entiendo como trabajo estar ahora hablando contigo y tampoco es un trabajo tan duro [ríe]. Ahora estamos en una fase de ampliación, y seguramente en breve necesite personal. Estoy comprando maquinaria más grande; y con esa capacidad de aumento de producción estoy preparando una contratación, una persona que me ayude con el proceso de elaboración, etiquetado y todo eso.

-¿Trabaja solo?

-De momento, sí. Tengo dos distribuidores que me ayudan a venderla. Por eso te decía que echo muchas horas. Es verdad que es diferente a cuando trabajaba por cuenta ajena. Ahora es para ti, tú te organizas, gestionas tu tiempo y es diferente.

 

-¿Por qué Aloumiña?

-La cerveza se llama Aloumiña, de aloumiñar. Aloumiña en gallego significa caricia, un agarimo; y como es una cerveza hecha con las manos y cuidando el producto, quiero que sea como una caricia al cliente.

-¿Cómo la da a conocer?

-Pues vamos dejando muestras para que la gente vaya probando el producto, para que nos digan si les gusta, y así la vamos comercializando.

 

-¿Por dónde se distribuye la cerveza Aloumiña?

-Se distribuye en Lugo. Hay sitios puntuales que la tienen, en Santiago, en Coruña. Incluso ahora estoy mandando a Málaga y a Madrid, pero como algo puntual. Nuestro objetivo es Lugo, porque en la ciudad hay muchos a los que me gustaría llegar y a los que aún no hemos llegado.

 

-Los productos artesanos están de moda. ¿Eso ayuda?

-Es verdad que ahora la gente prima un poco la calidad de los productos, aunque tenga que pagar un poquito más. Por ejemplo, ahora nosotros vendemos a tiendas que tengan productos artesanos, productos gourmet, naturales o ecológicos donde la cerveza se está vendiendo muy bien.

 

-¿Qué retos tenéis por delante?

-En principio, quiero llenar Lugo de cerveza Aloumiña. Esa es un poco la idea: a base de botella y a base de barriles, aumentar la producción y dando pasos pequeños. A nosotros lo que nos interesa ahora es vender más en Lugo, conseguir el mercado local, que la gente la conozca y que tengan la posibilidad de poder disfrutar en su cervecería de costumbre de una Aloumiña.

«Hizo falta mucha inversión. Todos los ahorros que tenía los metí en la empresa»

«Estamos en fase de ampliación, y seguramente en breve necesite personal»

eMPRESAS PARTICIPANTES EN EL PROGRAMA DINAMÍZATE