«Tengo que esperar año y medio para una operación muy sencilla, y sin la que no puedo trabajar»

La Voz

LUGO

01 nov 2014 . Actualizado a las 05:04 h.

Detrás de los datos estadísticos que ofrece el Sergas hay personas que sienten y padecen, como Carmen. Esta autónoma lucense, que prefiere ocultar su identidad real para evitar problemas, sufre túnel carpiano, un síndrome que afecta al antebrazo y que condiciona su vida laboral y personal por completo. «El nervio se inflama, presiona y deja sin sentido el brazo», explica la mujer, que lleva ocho meses esperando para hacer una resonancia y una electromiografía en el Hospital Universitario Lucus Augusti (HULA). Cuando le den los resultados, entrará en la lista de espera de cirugía. «Total, que tengo que esperar año y medio para una operación que es muy sencilla, y sin la que no puedo trabajar», denuncia Carmen, que destaca: «Necesito los brazos para trabajar». Mientras aguarda, dice, le han recetado «unas pastillas para calmar el dolor que no hacen nada y que en Estados Unidos están prohibidas».

La mandan a la privada

Al parecer, algunos traumatólogos de la sanidad pública le recomendaron que se operase en un centro privado. «Me dicen que vaya por la mutua, que así me operan antes, pero no tengo mutua porque soy autónoma, y con lo que pago de autónomos a la Seguridad Social, podría pagarme un seguro privado de la leche. Es una vergüenza», concluye.