1El Concello de Lugo, a través de su Concellería de Cultura y en colaboración con una serie de asociaciones, ha querido que este año la ciudad se sume a la celebración del Samaín, programando para ello una serie de actividades y talleres en plazas de la capital. Ayer, en las de A Milagrosa y Augas Férreas los participantes colorearon y decoraron calabazas, pintaron caras, asistieron a sesiones de cuentos de miedo y tomaron parte en rituales sobre vivos y muertos y en procesiones de ánimas.
Lo ecológico más cerca
2Fruto de un acuerdo con el Consello Regulador de Agricultura Ecolóxica de Galicia, estos días los consumidores pueden conocer de cerca los alimentos ecológicos en el centro comercial As Termas, a través de una exposición de fotos, degustaciones de productos, charlas y coloquios, proyecciones de vídeos, talleres para niños y hasta reparto de regalos. Ya saben, acérquense y prueben.
Custodia compartida
3Profesionales del ámbito de la abogacía, la judicatura y la política participaron ayer en tres de las mesas redondas con las que contó la segunda y última sesión de las Jornadas sobre custodia compartida celebradas en Magisterio. Con este debate, la Asociación galega de pais e nais separados da por cumplido su objetivo de abordar el tema de la custodia compartida desde una perspectiva plural y multidisciplinar, justo en el momento en que se prepara una modificación de la Lei de Dereito Civil de Galicia que podría incluir la figura de la custodia compartida como modelo preferente.
Rajoy en Mondoñedo
4El aspirante popular a presidente del Gobierno participó el viernes en un mitin en la capital lucense. Pero antes de ese baño de multitudes en Lugo, Mariano Rajoy estuvo reponiendo fuerzas por tierras mindonienses. En la villa natal de Cunqueiro, el líder popular paró a comer en el restaurante A Voltiña, establecimiento especializado en comida casera, y accedió a fotografiarse con la familia propietaria.
Exposición en Tor
5Estos días se puede ver en el pazo de Tor una muestra del pintor monfortino Roberto González. Las obras expuestas forman parte de la serie Vírgenes descuidadas, una reflexión simbólica sobre la violencia machista en la que el autor lleva trabajando desde el pasado marzo. Las imágenes, consistentes en fotografías digitales manipuladas, están distribuidas por las estancias del pazo formando una curiosa combinación con los antiguos cuadros y otros elementos decorativos de esta antigua residencia convertida en museo.