Crónica | Un restaurante ofrece platos adaptados a enfermos renales Milhoja de vieira crujiente, solomillo con boniatos y merluza en salsa americana con langostinos sustituyen a los recurridos filetes a la plancha y merluza cocida
06 sep 2006 . Actualizado a las 07:00 h.?os enfermos renales y especialmente los que acuden a diálisis ya podrán salir a cenar o a comer y degustar un menú adaptado a su dieta, diferente del socorrido filete a la plancha o de la merluza cocida. El restaurante Campos, con motivo del 25 aniversario de Alcer, la asociación que aglutina a enfermos renales, incluirá en su carta tres platos especiales. Se trata de una milhoja de vieira con crujiente de jamón, de solomillo de cerdo con boniatos y boletus y de una merluza en salsa americana con langostinos. Esta es una iniciativa pionera de cuya existencia la presidenta de Alcer, Delia Lorenzo, no tiene constancia en ningún otro restaurante lucense. Los tres platos, a los que dependiendo de la demanda se podrían añadir más, según el dueño del restaurante, Manuel Vázquez Yáñez, forman parte de un menú adaptado a pacientes de diálisis. Es decir mantiene a raya los niveles de potasio, el aporte de electrolíticos, la cantidad de proteínas y de sal. Y es que la dieta a la que están sometidos es muy estricta. En ella no figuran los líquidos, ni tan siquiera el agua y tienen que controlar las verduras, a través de varias cocciones. Las recetas, elaboradas mano a mano, entre Manuel Vázquez y su chef, Rubén García Díaz, serán presentadas al concurso nacional que organiza Alcer. Las tres están basadas en libros que recogen las características del régimen a que está sometido un enfermo renal y en los productos que habitualmente se encuentran en las despensas y frigoríficos de un restaurante. Manuel Vázquez sabe por experiencia propia -su padre acudía a diálisis- la dieta que tienen que seguir los enfermos renales y los cuidados precisos en la elaboración de los menús. Es consciente de que ampliar la carta con esta oferta especial no se notará en un aumento de la clientela, -tampoco es su objetivo- pero con esta iniciativa quiere aportar su grano de arena para mejorar la calidad de vida de las personas que están sometidas a un control tan estricto en su alimentación. Este menú les permite salir a comer fuera de casa y tomar algo especial diferente del típico filete a la plancha o la merluza cocida. «Psicológicamente -apuntó- es muy importante». Manuel Vázquez asegura que este mismo menú puede ser compartido, por solidaridad, por todos los integrantes de la mesa, aunque siempre deben de advertir cuántos platos son especiales para enfermos renales. El propietario del restaurante asegura que de la misma manera que disponen de una carta en inglés y que no tienen que usarla con demasiada frecuencia, tampoco les supone ningún trastorno incluir los platos diseñados especialmente para pacientes de diálisis. Los secretos de la preparación de los tres platos los desvelará el próximo número que la asociación Alcer sacará a la calle con motivo de su aniversario. Figurarán las recomendaciones específicas sobre la elaboración para que ésta esté adaptada a las necesidades de las personas que acuden a diálisis mientras esperan que aparezca un donante.