Bautismos y pruebas en Rozas

LUGO

CORRAL

Crónica | El critérium aeronáutico se abre a los lucenses El buen tiempo se alió con los organizadores, que pudieron llevar a cabo todas las actividades previstas, incluido llevar a 60 personas a volar media hora

14 jul 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

?cho rotaciones, _en el lenguaje profano, despegues y aterrizajes_ realizó ayer el avión militar que se desplazó a Rozas para participar en el critérium aeronáutico que inundó el aeródromo de Castro de niños y adultos dispuestos a vivir la aventura de un bautismo en el aire. Unas sesenta personas pudieron ver cumplido su deseo en el transcurso de la jornada y otras tantas, en la precedente. Ayer fue el día de las asociaciones y se fueron sucediendo por el aire los integrantes de Daño Cerebral, Síndrome de Down, mayores y voluntarios de Cruz Roja, alumnos del instituto de Castro y de otros ayuntamientos y otros participantes, seleccionados por las asistentas sociales de los concellos. La tripulación adaptaba las emociones de la media hora de vuelo al pasaje de cada rotación. Cada vuelta transportaban a entre 12 y 15 personas, dependiendo del peso conjunto. Unos bajaban con aspecto de haberse mareado con tanto giro, en tanto que otros pedían al piloto insistentemente «más». El tiempo se portó con la organización y la primera y la segunda etapa de la Volta Aérea a Galicia pudo desarrollarse con normalidad y a su hora. Las ocho aeronaves que participaron, dos de ellas de Lugo, pudieron efectuar el recorrido establecido hasta Braganza, sin problemas. Tuvieron que atravesar una tormenta en la zona de Ourense, lo que no les impidió regresar a Rozas a la hora prevista. Entre las naves figuraba una Cesna 182, tripulada por Gus y Fran Abelleira, miembros de la tercera generación de pilotos de esta conocida familia lucense, ambos hijos de Luis Abelleira Mayor, presidente del Aeroclub de Lugo. Con ellos iba Manolo Valle. Son los participantes más jóvenes de la Volta. Dos tienen 19 años y el tercero, 25. Muchas de las personas que se acercaron ayer al aeródromo de Rozas, en el segundo día de puertas abiertas, esperaban poder surcar el cielo de Castro de Rei en globo o tirarse en alguno de los tándem paracaídas, que estarán operativos a partir de hoy. El critérium despertó una gran expectación entre los lucenses, cumpliendo de esa forma el objetivo marcado por el Real Aeroclube de Lugo, que quiso en esta ocasión hacer partícipes a los no socios de sus actividades aeronáuticas y compartirlas con ellos. Hubo colas para recibir el bautismo en el aire, especialmente a lo largo de la tarde. Para poder participar en las actividades es necesario desplazarse al aeródromo e inscribirse en una oficina habilitada para ello, donde hay que firmar una autorización y retirar la cita correspondiente. Esta mañana, en que se disputará la tercera etapa de la Volta a Galicia, se podrá montar el globo y algunas personas tendrán la oportunidad de descender en paracaídas. El Aeroclub de Lugo se puso en contacto con el equipo de saltos del Ejército Papae para realizar unha exhibición. Tienen su sede en la base militar de Alcantarilla y son los que aportaron el avión que realizó ayer los bautismos en el aire. Las jornadas de puertas abiertas no concluirán hasta el domingo próximo.