De la cantera del Santos al Lemos

luis conde MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

CEDIDA

El nuevo fichaje del equipo monfortino, Fernando Almeida, pasó ocho años en el club brasileño

28 ago 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El éxodo de futbolistas de América del Sur hacia Europa se ha convertido en una realidad en las últimas temporadas. Y no solo atraviesan el Atlántico para jugar en los clubes de élite del viejo continente, sino que lo hacen para probar suerte en categorías como Tercera División y Preferente Autonómica. La mayoría justifican su decisión en la necesidad de buscar un trampolín para introducirse en el fútbol profesional.

Y en la mayor parte de los casos son futbolistas que se formaron en las canteras de los mejores clubes argentinos y brasileños. Un ejemplo lo encarna Fernando Almeida Zanón, un mediocentro de 22 años, que se formó en la cantera del Santos, un histórico del fútbol brasileño. Después de pasar por la Sarriana y el Arzúa, ahora jugará en el Club Lemos. Fue una petición expresa del técnico, Alberto López, que tiene una fe ciega en el futbolista.

Fernando nació en Mucuri, en el estado de Bahía, pero residió siempre en la ciudad de Linhares, ubicada en el estado de Espírito Santo. Desde pequeñito, prácticamente con los pañales, comenzó a darle sus primeras patadas al balón. «En Brasil la mayoría de los niños crecimos como futbolistas jugando en la calle, y a partir de ahí los que más destacábamos fichábamos por equipos», comenta el nuevo jugador del Club Lemos.

Su primer club fue el Linhares, donde estuvo a los 10 años. A esa edad le llegó la oportunidad que sueña todo niño en Brasil: fichar por el Santos. Hizo una prueba y deslumbró, lo que provocó que los técnicos lo incorporaran. Ahí estuvo ocho temporadas. Siendo juvenil llegó a tener contrato profesional, pero no debutó en el primer equipo. Eso sí, ya tenía sueldo. «Ganaba lo que serían unos 1.200 euros, que era una cantidad aceptable para un chico de 16 años», afirma.

Salto a Austria

Y fue en el 2017 cuando dejó su país para probar suerte en Europa. A través de un representante fichó por un equipo austríaco. Jugó ocho meses en Tercera División. Destacó, pero un cambio en la propiedad del club y una inoportuna frenaron su renovación. Tuvo que volver a Brasil. Pero estuvo poco tiempo, ya que viajó a España para probar por el Ourense CF. «Estuve tres semanas, pero no fiché porque tenían la plantilla cerrada, y fue cuando el presidente, Camilo, se puso en contacto con Alberto López, que me fichó para la Sarriana y después para el Arzúa», señala Almeida.

Con el ahora entrenador lemista fue cuando explotó definitivamente. «Fue clave en mi crecimiento y progresión. Desde el principio me entendí a la perfección con el míster», apunta el jugador brasileño.

Y precisamente, el hecho de que López entrene al Lemos fue clave para su fichaje. «Sí, fue decisivo para que yo haya fichado por el Lemos. Me conoce a la perfección, y por más que no pueda hacer el mejor equipo, sus plantillas siempre compiten al máximo. Y eso me motiva, y nada mejor que formar parte de su proyecto de nuevo», dice.

El jugador brasileño destaca por su polivalencia y puede jugar de central y de pivote

Fernando Almeida destaca por su polivalencia. «Yo comencé como central, pero con Alberto ya lo hice como pivote. Aquí me desenvuelvo bien, y es donde me gusta jugar. De mediocentro no me apetece mucho», afirma.

Es un futbolista de corte defensivo, que destaca por las jugadas a balón parado y por el juego aéreo. Un jugador que aportará equilibrio al equipo y por el que suspiraba Alberto López, que llegó a temer por su incorporación. Y es que, según el jugador, la Sarriana se le acercó. «Sí recibí un mensaje de su entrenador, pero solo fue eso, ya que nadie me llegó a llamar», asegura Fernando Almeida.

Llegará el jueves

El jugador brasileño saldrá de Brasil el martes. El miércoles llegará a Madrid y el jueves a Monforte. De hecho, ese día ya podría ejercitarse con sus nuevos compañeros a las órdenes de Alberto López.

«Vengo con muchas ganas de ayudar al Lemos a conseguir sus objetivos, y que esto me sirva de trampolín para llegar al fútbol profesional», concluye.