Abadía da Cova, relevo generacional con vinos radicales bajo el brazo

Luis Díaz
LUIS DÍAZ MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

MARTA SERRAPIO

Los hijos de José Manuel Moure y Evaristo Rodríguez recogen el testigo de una bodega pionera en Ribeira Sacra

13 feb 2019 . Actualizado a las 07:54 h.

La cuarta generación de los Moure toma las riendas de Abadía da Cova. Y no es solo un cambio de caras. Hay nuevos nombres al frente, pero también proyectos sobre la mesa que anuncian otro rumbo. La renovación no se acaba en el aire más actual del etiquetado de las marcas más recientes. Se saborea en el perfil de unos vinos que no quieren perder el tren de los tiempos. El Salón de Vinos Radicales que se celebrará la semana próxima en Madrid contará por vez primera con la presencia de una de las bodegas históricas de Ribeira Sacra. Toda una declaración de intenciones con vistas al futuro.

Evaristo Rodríguez -junto con su cuñado José Manuel Moure, ya apartado de esta actividad- llevó en los últimos treinta años las riendas de Abadía da Cova. Ahora le toca ceder el testigo a una nueva generación familiar que tiene su propia manera de ver el vino. «O relevo na adega tamén é conceptual. Vanse facer viños máis naturais, nos que vai primar o respecto á súa orixe sobre a sofisticación nos métodos de elaboración», explica el bodeguero.

El afán de calidad que definió los inicios de la denominación de origen ha dejado de ser un argumento de diferenciación dentro y fuera de Ribeira Sacra. A partir de esa premisa, el Salón de Vinos Radicales ofrece su escaparate anual a bodegueros que en sus elaboraciones anteponen el carácter que transmite una viticultura singular. Allí estarán los nuevos vinos de Abadía da Cova: un blanco de loureira y los rosados monovarietales de caíño y meranzao.

Más naturales y de terruño

Las nuevas elaboraciones, y la última añada del mencía ecológico, fueron presentados recientemente en la bodega a la prensa especializada. Evaristo Rodríguez estuvo acompañado por el nuevo equipo de Abadía da Cova, del que forman parte José Moure y Paloma y Adrián Rodríguez, además del enólogo Nacho Álvarez. «Nacho sintoniza por completo cos novos viños que queremos facer, máis naturais e expresivos da terra e da variedade», apunta Evaristo Rodríguez.

El reparto de tareas de este nuevo equipo está perfilado. Adrián Rodríguez se encargará de la bodega, que ampliará su catálogo bajo la dirección técnica de Nacho Álvarez con una nueva gama de vinos monovarietales y de parcela. Paloma Rodríguez y José Moure se encargarán del márketing y de todos los aspectos relacionados con la comercialización.

La bodega de O Saviñao mantendrá la línea de marcas más clásicas, sin renunciar a sacar partido del potencial de sus viñedos para la elaboración de vinos singulares. «Temos moito viñedo vello en zonas moi diversas», detalla Evaristo Rodríguez. Pero será una nueva generación la que saque partido del trabajo realizado por esta bodega desde la puesta en marcha de la denominación de origen. En Abadía da Cova hay relevo, que es mucho decir en Ribeira Sacra.