Fernando renovó por el Coruxo

luis conde MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Oscar Vázquez

El centrocampista de Fión jugará por segundo año consecutivo en Segunda B

20 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El fútbol comarcal continuará teniendo representación en el grupo primero de la Segunda División B. El jugador de O Saviñao Fernando Beltrán renovó su contrato con el Coruxo, equipo del que fue uno de los grandes referentes la pasada temporada. El deportista de Fión tenía sobre la mesa varias ofertas, pero finalmente decidió continuar en el cuadro pontevedrés, consciente de que ahí tendrá continuidad.

Después de jugar cinco temporadas en la Tercera División, a sus 25 años, Beltrán ya se ha asentado en Segunda B, categoría a la que dio el salto el pasado verano. El jugador explica las razones que lo llevan a continuar: «Sigo aquí, porque me pareció el mejor proyecto. Estamos hablando de un proyecto estable y de un club que busca consolidarse en la categoría de bronce del fútbol español. En el Coruxo me siento importante y considero que es el club idóneo para continuar creciendo», comenta Fernando Beltrán.

El jugador certificó una gran temporada a las órdenes de Rafa Sáez. A pesar del salto de categoría, Beltrán se adaptó rápido y perfectamente, lo que le permitió ser titular prácticamente en todos los partidos. «La verdad es que estoy muy contento de como me salió la campaña, y lo digo tanto en el apartado individual como colectivo», añade.

Por lo que respecta a las diferencias que encontró entre la Tercera División y la Segunda B, Fernando dice: «En esta categoría el ritmo es bastante más alto y la calidad del fútbol es mayor. Pero es normal, porque ya estamos hablando de fútbol profesional».

Desde sus comienzos, Fernando Beltrán ya apuntaba maneras. En todos los equipos en los que compitió marcaba las diferencias, circunstancia que le valió para dar el salto de categoría.

El cerebro del equipo

El futbolista de Fión se prodiga como mediocentro y como mediapunta. El cerebro del Coruxo destaca por su técnica exquisita, su excelente visión de juego y su polivalencia. Completa todas estas virtudes con las jugadas a balón parado. No solo las ejecuta magistralmente, sino que también las remata. Fiel a la humildad que lo caracteriza, asegura que todavía tiene margen de mejora.

Fernando dio sus primeros pasos como futbolista en el Calasancio. En el club estudiantil se formó y comenzó a deslumbrar. Sus actuaciones en cada partido merecían los elogios de los entrenadores, compañeros y directivos. Esto enseguida llamó la atención de los técnicos y ojeadores de los grandes clubes gallegos. Al final se adelantó el Deportivo, que lo incorporó en edad cadete. En tierras coruñesas estuvo hasta los 19 años, momento en el que comenzó su andadura en Tercera División.

Primero fichó por el CD Lalín -en este caso fue a través de la fórmula de cesión por parte del Deportivo-. Su siguiente parada fue en el Alondras. En esta etapa vivió su auténtica pesadilla como futbolista, puesto que se rompió la rodilla. Durante una temporada y media estuvo en el dique seco. En ese trance tan duro llegó a pensar que no volvería a jugar y si lo hacía que no rendiría igual.

Gracias al apoyo de la familia, amigos y compañeros superó esa difícil etapa. Dejó el Alondras y se fue al Choco. Su entrenador, Jacobo Montes, creyó en él, y Beltrán respondió. El jugador de Fión fue clave para que los pontevedreses disputaran el play off de ascenso a Segunda B. De aquí pasó al Coruxo, donde cumplirá su segunda campaña.