El Calasancio continúa formando futbolistas que apuntan alto. Este es el caso del benjamín David Díaz Castro, una joven promesa de 9 años, que se ha convertido en el máximo goleador del conjunto de Denís. El ariete suma once goles, y su contribución está siendo decisiva para la trayectoria de un conjunto estudiantil, que ocupa la séptima posición de la clasificación en la primera categoría provincial de Ourense.
David está muy contento de la campaña tanto en el apartado colectivo como individual. «Estoy satisfecho, porque con el paso de las temporadas estoy aprendiendo mucho, y además estoy marcando goles, que es lo más bonito para un delantero. El equipo está bien, y competimos a tope por conseguir clasificarnos entre los cuatro primeros, posiciones que nos llevarán a ascender a la liga gallega. De todos modos, tengo que decir que es una liga muy difícil», dice la joven promesa monfortina.
El jugador comenzó en el fútbol a los 5 años, y siempre se prodigó como ariete. «Cuando era pequeñito ya jugaba con mi padre en casa y también me divertía tirando el balón a las paredes. Decidí jugar de delantero, porque siempre me gustó marcar goles y dar asistencias», indica.
Su potencial goleador ya lo ha refrendado en varios partidos. En un partido de liga ante a Peroxa marcó siete goles. David quiere seguir los pasos de otros futbolistas que pasaron por el Calasancio, como son los casos de Richi, Álex, Diego Penas, Iván González, Diego Torres, entre otros, que tuvieron la oportunidad de competir en clubes importantes. «Me gustaría ser futbolista profesional, y estoy convencido de que si sigo esforzándome así y tengo suerte puedo alcanzar mi sueño», apunta.
Su trayectoria
David se estrenó en el fútbol en las categorías inferiores del Club Lemos, pasando a continuación al CF Monforte, conjunto desde el que dio el salto al Calasancio. «Estoy muy contento de tener como entrenador a Denís, porque trabaja muy bien y nos enseña muchas cosas. Es exigente, y lo hace por nuestro bien. Además, prepara unos entrenamientos muy divertidos», añade la joven promesa estudiantil.
A pesar de sus 9 años, David muestra una gran madurez en todas sus reflexiones y en los objetivos que persigue. El joven delantero anima a todos los niños a los que le gusta el fútbol que se esfuercen y trabajen para evolucionar y para ir escalando etapas, eso sí, sin olvidar los estudios. «Hay que entrenar para aprender y mejorar, pero no se deben dejar de lado los estudios, porque las dos cosas son compatibles, siempre y cuando se programe y aproveche bien el tiempo», indica.
Su tiempo libre
David vive las veinticuatro horas para el fútbol, aunque admite que también juega al voleibol. «Siempre que me lo piden mis amigas. Lo importante es hacer deporte», concluye.
La joven promesa quiere llegar a los veinte goles esta temporada con su equipo.
«Decidí jugar como delantero desde que empecé en el fútbol, porque me gustaba marcar goles»
Futbolista del Calasancio