1 El Pazo de Tor, en Monforte, es uno de los pocos establecimientos de la provincia que figura en la guía de turismo accesible que la Plataforma Representativa de Personas con Discapacidad Física (PREDIF) publica anualmente, para ayudar a personas con discapacidad a disfrutar del ocio y el turismo. Ese fue, entre otros, uno de los motivos por los ayer acogió el taller destinado a discapacitados «O Pazo de Tor, un museo de sensacións» organizado por la Rede Museística en colaboración con las asociaciones Agora y Cogami. En el taller - en el que los sentidos eran los protagonistas- participaron cerca de ochenta personas procedentes de Monterroso, Lugo y Monforte que aprovecharon la ocasión para visitar el Centro do Viño.
Chantadinos en Dinamarca
2 Un viaje mucho más largo es el que hicieron un grupo de profesores y alumnos del instituto Lama das Quendas de Chantada, que estos días participan en un intercambio con un un centro de la ciudad de Hjørring, en Dinamarca, devolviendo una visita que alumnos y profesores daneses hicieron el pasado curso. El tiempo parece que no los está ayudando mucho, ya que allí la lluvia tampoco da tregua, pero eso no impide que realicen numerosas actividades y conozcan el país. Durante estos días han tenido ocasión de visitar diversos lugares de interés, además de en Hjørring, en Copenhague y la ciudad de Skagen, en la península de Jutlandia.
Obesidad infantil
3 En Dinamarca algo más del 13% de los chavales sufre obesidad infantil. Allí el estado fue pionero en todo el mundo al gravar con fuertes impuestos los alimentos que superen el 2,3% de grasas saturadas. En España, donde la obesidad infantil supera el 25%, se ha convertido en un grabe problema. Por eso se han puesto en marcha programas como el «Pecoidal», en Lugo, que pretende fomentar una vida saludable entre los más pequeños. Ayer, en la sede de la Diputación, entregaron los premios a los ganadores del concurso «Ti, que almorzas», un certamen en el que alumnos de quinto y sexto de primaria realizaron un dibujo relacionado con el lema de la campaña. Aunque la vencedora fue la joven María Veiga, todos los participantes se llevaron un obsequio por el mero hecho de colaborar.