Un estudio alerta sobre los efectos de la repoblación con peces que no son autóctonos

La Voz

LEMOS

15 may 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

La web dedicada a la pesca deportiva conservacionista de la asociación Ríos con Vida recoge un interesante estudio sobre los daños ambientales de la suelta de truchas no autóctonas, del que se han echo eco otros portales en Internet de similar contenido, como es el caso de la página vadeando.com. El trabajo está firmado por José María Blasco, doctor en veterinaria; Pedro Brufao, catedrático de derecho administrativo; y César Rodríguez, consultor medioambiental. Las que siguen son algunas de las conclusiones a las que llegaron.

HÁBITAT

Causa de degradación. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente sitúa la introducción de especies procedentes de determinados hábitats en otros diferentes de los originales como la segunda causa de degradación ambiental global. En muchas ocasiones, las especies introducidas para repoblar arrasan los ecosistemas naturales. En nuestros ríos, el problema planteado por la llegada de trucha arco iris se complicó cuando la administración comenzó a liberar determinados ecotipos de trucha común de origen centroeuropeo.

BIOLOGÍA

Alteración reproductiva. La liberación de manera masiva y sistemática de estas truchas de granja ha provocado el trasvase de sus genes a nuestras poblaciones autóctonas, ocasionándoles importantes niveles de genes fundamentales para su supervivencia y adaptación a medio y largo plazo. Todo ello para la fácil satisfacción de algunos autodeterminados pescadores deportivos, que la administración acostumbró durante a años a repoblaciones que parecían asegurar eternas y grandiosas capturas.

FUTURO

Imperativo moral y legal. Existe la obligación moral y también legal de mantener la variabilidad y riqueza genética de las poblaciones trucheras autóctonas. Sabemos que muchas de nuestras poblaciones trucheras no son lo que fueron hace treinta o cuarenta años. Pero por suerte hoy todavía conservamos numerosos tramos fluviales con buenas poblaciones autóctonas de salmónidos que debemos preservar a toda costa.