El concejal de Policía acusa al PP de practicar «política carroñeira»
22 ene 2011 . Actualizado a las 06:00 h.La denuncia judicial presentada por un inspector de la Policía Local contra el director general del citado cuerpo sigue coleando en el patio municipal lucense. Ayer, el sindicato CSIF apuntó que si el alcalde no toma cartas en estos asuntos demostrará que es «prisionero de su concejal de Protección da Comunidade», José Rábade, que, a su vez, acusó al PP de practicar «unha política carroñeira», por pedir la destitución del director general. El conflicto entre la Policía Local y el gobierno lucense sigue vivo y sin visos de solución.
La denuncia del inspector se debe a que, supuestamente, el director general trató de convencer a dos agentes de la Guardia Civil , que investigaban el caso Carioca, para que hicieran un seguimiento, por motivos laborales, del ahora denunciante. CSIF dice que siempre puso de manifiesto la, a su juicio, persecución a la que el director general sometía a algunos policías, la mayoría afiliados a este sindicato. Los hechos que se reseñan en la denuncia, indica CSIF, confirman a su entender que Darío Diéguez fue designado para «aplastar a algunos funcionarios policiales». Así se entiende, señala, que el edil Rábade diga que no se plantea la destitución de Diéguez porque está «facendo o seu traballo».
El mismo sindicato se muestra convencido de que Diéguez lleva a cabo una campaña para desprestigiar a la Policía Local. También recuerda que el director general contrató en su momento a detectives privados para seguir a agentes de la Policía Local. En el caso denunciado por el inspector, «se le ha ido la mano», opina CSIF. Señala: «Si Orozco esta vez no reacciona y continúa escondiéndose tras José Rábade y Darío Diéguez, dando la callada por respuesta, podemos sacar dos conclusiones que él mismo podría debería aclarar. O el alcalde apoya y aprueba totalmente estos actos y métodos (...) o es prisionero de su concejal de Protección de la Comunidad, al que no puede contradecir».
El sindicato alude a unas declaraciones del edil Rábade, para dejar claro que la sentencia a la que se refiere dio la razón al inspector que ahora presentó la denuncia, salvo en lo referente a la indemnización que solicitaba. CSIF dice que si Orozco incluye a Rábade o Darío Diéguez en su lista electoral supondrán para él «una rueda de molino que lo hundirá más allá del fango».
Por su parte, el edil José Rábade, calificó de «política carroñeira» las declaraciones del concejal popular Enrique Rozas, que el pasado jueves pidió la destitución de Darío Diéguez como director general. También en referencia a las manifestaciones de Rozas, indicó que la contratación en su momento de un detective privado por el director general se debió a que «había un funcionario que estaba poñendo copas cando estaba de baixa». «Non hai nada ilegal», declaró Rábade, que aludió a los problemas y polémica que hubo en la década de los años 90 del siglo pasado, cuando gobernaba el PP, por el uso de las cámaras de tráfico.