El cantaor presentará esta tarde su nuevo disco, en el que lleva 13 años trabajando y en el que incluye toques del jazz o el soul
07 oct 2009 . Actualizado a las 02:00 h.El Kiki se ha tomado más de diez años para aprender. Cada noche recorre tablaos madrileños como el de Casa Patas, Las Tablas y otros «de los castizos de toda la vida» para empaparse de cante jondo, pero afirma que no quiere quedarse solo en el flamenco puro. Por teléfono y de camino al local de ensayo en Madrid, El Kiki no ocultó ayer la ilusión que le hace volver a actuar «en mi tierra, ante mis lucenses» después de muchos años sin hacerlo en público.
-¿Por qué se ha tomado tanto tiempo?
-Grabé el disquito con solo 12 años y fue muy bien. Después, estuve un tiempo encontrándome a mí mismo y escuchando mucha música: ritmos diferentes como el jazz, el funky o el soul. También he estado en Francia, en un musical, y he aprendido muchísimo. Mientras tanto, el Concello me propuso varias veces actuar en San Froilán, pero yo veía que no estaba todo listo para dar un concierto como yo quería.
- Entonces, ¿hoy ya podrá presentar todos sus nuevos temas ?
- Sí, cuando seleccioné los temas presenté mi proyecto en el Concello. Por motivos económicos, no se pudo hacer el espectáculo que yo quería, que sí estoy haciendo en otros sitios y que es precioso, porque me acompañan una bailaora y músicos buenísimos. Me da un poco de rabia, pero el Concello me dijo que no podía ser, así que como yo no podía aportar la diferencia, he buscado otros músicos, también muy buenos, de los de primera línea. Es un orgullo que un lucense venta a su tierra arropado por músicos así. Me hace mucha ilusión actuar. Me gustaría destacar que el concierto de esta tarde también lo financia Autos Galicia, que está patrocinando toda mi gira.
-Ese aprendizaje del soul, del jazz o del funky, ¿se apreciará esta tarde?
-Sí, claro. No es que vaya a haber jazz ni funky porque les tengo mucho respeto a los dos, pero en el nuevo disco hay una soleá, que es un cante jondo, un cante muy profundo del flamenco, que se ha arreglado con contrabajo y con piano de cola. Así le da otro aire.
-¿Podría decirse que va a ser un disco de fusión?
-El próximo disco son 14 temas en los que hay mucho cante jondo y una voz flamenca, pero quería hacer algo diferente. Me he arriesgado probando cositas del soul o incluso de la salsa, pero sin perder lo mío. Creo que es muy bueno aprovechar la inquietud del joven para escuchar otras cosas, pero siempre aprendiendo de otros veteranos. Por ejemplo, en este disco también estuvo trabajando conmigo Antonio Humanes, que fue productor de Camarón y murió hace unos años. Me compuso varios temas y yo he seleccionado dos. El resto, los otros doce temas, son míos.
-¿Cómo se va a titular el disco?
-No lo sé. Tengo pensado varios títulos, de frases de las canciones, pero aún no he decidido cuál será el definitivo. Quiero que sea algo reivindicativo.
-Y después de tantos años, ¿cuándo podrá comprarse, por fin, lo nuevo del Kiki?
-Estaba previsto para este año, pero ha habido un parón y las cosas se han retrasado un poco. Hace tiempito que tengo hecha la preproducción y eso agiliza mucho las cosas. Ahora voy al estudio y me llevará un mes y medio o dos. El disco, si Dios quiere, estará a principios del año que viene.
-¿A qué flamencos de hoy en día admira?
-Ahora mismo está el Cigala o la Pastori, pero hay muchos otros cantaores que no son tan conocidos y son verdaderos monstruos, como Antonio Ingueta. Ellos tienen entre cuarenta y cincuenta años y vienen de otras etapas, han estado al lado de Camarón y de otros grandes, así que puedes empaparte de mucha gente buena.